Save Me 》J.B《

》Te puede costar la vida《

(...)

Al salir de aquel bar de mala muerte y mientras Justin iba cargando a mi madre yo lo seguía, fuimos hasta su auto, supongo.

-Abreme la puerta -ordeno de manera fría, yo me limite a obedecer aun sabiendo que esto podría ser un grave error.

Recosto a mi madre en la parte de atras y luego me miro enfadado.

-Sube -ordeno de nuevo. Abrí la puerta del copiloto rapidamente y subí deprisa. Unos segundos mas tarde y él ya estaba sentado del lado del piloto.

Comenzo a conducir rumbo a mi casa, era obvio que sabía que yo era la chica que los vio secuestrando a ese pobre chico, ¿que consecuencias podría traerme eso?

-No era tan inocente -murmuro, ¿que acaso lee la mente? ¿o de plano si tengo al mismísimo demonio sentado a mi lado?

Yo asentí con la cabeza tratando de no ser tan obvia.

Al cabo de unos veinte minutos llegamos a mi casa, Justin bajo del auto a mi madre y luego camino hasta la puerta de mi casa con ella en brazos.

-Gracias... -dije e intente tomar a mi madre pero el se alejo.

-¿Que haces? Pesa casi lo doble que tu, no la podrás -rodó los ojos.

-Que camine -dije indiferente.

-¿No la ves? Esta dormida, abre la puerta, ¿piensas que te hara algo? -lo mire como diciendo "si, pienso que me cortarás en pedacitos y luego se los darás de comer a tu perro"

-No -respondí.

-Entonces abre -ordeno de nuevo.

Me apresure a abrir la puerta, pero es que la verdad estaba temblando y mas al ver salir el arma de Justin por el pantalon, estaba metida en un gran lío.

Justin sin preguntar subio hasta la habitación de mi madre mientras que yo le seguia temerosa, al estar dentro dejo a mi mamá sobre la cama y ella se acurruco plácidamente.

-Listo -susurro Justin y luego salio de la habitación dejandome sola con mi mamá.

Yo me acerque a ella, le quite los zapatos y luego la arrope muy bien.

-Prometiste que ya no lo harías -susurre cerca de su oido y trague saliva al sentir un nudo inmenso en la garganta.

Pero luego recorde que Justin estaba en la casa, en ese momento sentí la piel de gallina, salí de la habitación de mi madre y la cerre por fuera.

Baje las escaleras y me encuentro con Justin esperando sentado sobre el sofá, tenia un vaso con jugo en la mano y no me quitaba la vista de encima.

-Gracias -dije casi inaudible.

Él sonrio.

-Abrir la boca en Detroit te puede costar la vida, o la de tu familia -dijo y dio un sorbo a su bebida.

-No dire nada -trague saliva en seco.

-Lo se, me debes un favor y me lo tienes que pagar -termino de un trago la bebida y dejo el vaso vacio sobre la mesa de centro.

-Te lo pagare, cuando tenga el dinero.

Sonrio de nuevo.

-No te pedí dinero -se puso de pie y camino hasta estar a unos centimetros de mi, en esos momentos apreté los ojos, no queria ver lo que pasaría.

Pero al abrirlos veo la puerta abierta de par en par y Justin no estaba, ¿wtf? ¿acaso estaba soñando?

Negue con la cabeza.