Oopsy Daisy.

26. Algo.

-Hola...

Recuerdos de la noche anterior llegaron a mi mente, no pude evitar mirar su boca. De labios suaves y rosados que se curvaron en una sonrisa.

-Deberías estar en clase ¿Qué haces aquí? – me pregunto. Tenía el pelo peinado asía atrás. Vestía camisa, pantalón y zapatos negros, mas su mochila enganchada en su hombro

- Es que Gill...- me gire en busca del chico para que me ayudara a explicarme, pero el desgraciado ya se había ido. Trague y me volví a Zack. – Miren quien lo dice- dije cruzándome de brazos - ¿Qué haces TU llegando tan tarde?

El ladeo el rostro. Le divertía verme en modo desafiante.

-Fui a visitar a alguien.

-¿A esta hora? – eran las 7:30 am ¿A quién visitaría tan temprano en la mañana?

Zack me miro entrecerrando los ojos. Yo le alce una ceja cuestionaste. Lentamente bajo su rostro a mi nivel, acercándose hasta que pude sentir su respiración mezclarse con la mía. Mis parpados cayeron preparándome para lo que vendría... pero no pasó nada.

- Debería estar en clase de arte señorita Brooklyn - me susurro al oído.

Abrí mis ojos desconcertada y lo que encontré fue su espalda alejándose pasillo abajo.

"Le voy a quitar esa mala costumbre. Cueste- lo- que- me- cueste "Pensé soltando una bocanada de aire que no sabía que tenía contenida.

¿Quién diría que Sr. Nerd sabría provocar?

-Así que "Yo lo sé todo" y tú tienen algo.

Forest bebió de su refresco esperando mi respuesta. Yo me mordí el labio mientras jugaba con el plato de ensalada frente a mí.

-No es solo algo. Es... algo.

-¿Y qué se supone que significa eso?- Soltó Brook - No me hables con mierda profunda.

Seguido engullo lo que quedaba de su burrito de una mordida. Yo ataque mi ensalada con el tenedor pensando exactamente que era el algo que teníamos yo y Zack. No podía nombrarlo aún, solo teníamos un día teniendo ese algo. Pero estaba segura de que era un algo bueno.

-En fin. Tenemos cosas más importantes que discutir: Que haremos para celebrar esta noche por ejemplo. – recordó Forest emocionado.

Ya podía verme a mí misma en algún club bailando y bebiendo chupitos de tequila con mis amigos. Entonces la imagen de Zack y yo sentados en una mesa de algún restaurante cursi con velas y un violinista se robó la escena.

-Tengo una cita con Zack esta noche.- informe con media sonrisa.

-Oh no. Ni hablar – se quejó Brook – los cumpleaños son para alocarse. Cumples dieciocho ¡Por fin podrás ir a las discotecas sin tu tonto sentimiento de culpa y beber legalmente!

-Podemos alocarnos legalmente mañana. Además no quiero irme de fiesta sin Jared. – nosotros somos como las chicas Superpoderosas... solo que en vez de tres somos cuatro... y dos son chicos. El punto es que ninguno se queda atrás.

-Jared nunca paga el tequila, así que no hace falta – dijo Brook.

-Tú tampoco pagas. – replico Forest.

Brook se encogió de hombros.

-Porque gastar el mío cuando podemos gastar el tuyo.

- Se supone que Jared es tu novio ¿Vas a ir a la discoteca a bailar caliente con otros sujetos? –