No puedo

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El fin de semana pasó muy lento entre nutella y pelis después de lo sucedido en la fiesta.
Ahora estoy intentando apagar el despertador para ir al colegio. Se me han pegado las sábanas y no quiero ir al colegio. Más que nada por Brandon.

Me despierto, me aseo, desayuno y me visto. Cojo las cosas y me voy. Decido no esperar a Brandon y me le mando un mensaje a Jonnhy diciéndole que no me recoja y que ya le contaré todo luego.
Antes de llegar al colegio doy una vuelta por el parque ya que he salido pronto de mi casa para no encontrarme con Brandon.
El tiempo se me pasa rápido y me dirijo casi corriendo al colegio para no llegar tarde. Al llegar al colegio veo a Brandon. Está destrozado, apoyado en el muro del colegio y sentado en el suelo. Me duele verlo así pero después de lo que hizo no puede acercarme y hablar con el que es lo que me gustaría. En vez de eso me decido por salir corriendo, porque si seguía mirándolo se daría cuenta de que le miro y a mí se me saldría el corazón de los nervios.

Salí corriendo lo más rápido que pude hacia el parque. Concretamente hacia el árbol donde el y yo dibujamos un corazón con nuestras iniciales. Aún no me puedo enfrentar a el, es demasiado pronto.
Me apoye en el árbol, pero estaba no lloré. No pienso llorar más. En vez de eso me puse a pensar que hacer.
Me cuesta estar sin el pero también estar con él y no sé qué hacer


Narra Brandon
Estamos todos muy preocupados, no sabemos donde está Ana. No contesta a las llamadas y no ha venido al colegio. Y seguramente todo esto será por mi culpa. Si ella supiera que todo fue un malentendido y que no pasó lo que ella cree, yo no estaría así.
Me preocupa que cuando le diga lo que pasó no me crea. Y no quiero perderle por nada del mundo. En poco tiempo ha sido mi mundo entero, así que ahora lo puedo perderla así sin más.

Los chicos no saben nada de lo que ha pasado. Ya se lo contaremos todo cuando lo arreglemos.
Ahora lo único me que me interesa es encontrar a Ana y saber que está bien





Narra Ana
Hacia las once de la mañana mientras todos estaban en el colegio, decidí levantarme de allí y me dirigí a la escuela. Creo que ya estoy lo suficiente preparada como para no salir corriendo cuando vea a Brandon.

Al llegar le dije a la profesora que había tenido un pequeño accidente con el coche y no he podido llegar antes. Me ha dejado pasar, pero tengo que presentarle un justificante mañana. No se como se lo diré a mi madre, pero ya me las apañaré.
Al entrar siento que muchas miradas se centran en mi y sobretodo una en especial.
Me dirijo a mi asiento, que adivinar dónde es, al lado de Brandon. Me siento y intento prestar atención a la clase, aunque no puedo, la presencia de Brandon tan cerca me hace estar incómoda, aunque no le he dedicado ni una sola mirada se que la suya no se ha apartado de mi en todo el rato.

Las clases son lentas y al fin toca la campana que dice que se acaban las clases por hoy.
Recojo rápido y salgo de la clase a la velocidad de la luz. El pasillo está lleno de gente y siento como una mano me agarra del brazo y hace que me detenga. Me giro a ver quién es, y obvio es Brandon.

Brandon: tenemos que hablar
Ana: no tenemos nada de qué hablar
Brandon: por favor Ana. Dame una oportunidad. Sé que estás enfadada pero no es lo que tú crees
Ana: no puedo, todavía no. Esa frase ya me la conozco y no me trae buenos recuerdos.
Brandon: por favor, por lo menos prométeme que lo pensarás
Ana: no lo sé Brandon. No se - me giro y sigo andando. Brandon comienza a andar detrás mía pero consigo despistarlo entre la multitud. Al salir me encuentro con todos los chicos, prefiero no hablar con ellos ahora así que hago lo que puedo para que no me vean. Y me dirijo de nuevo al árbol de antes

Can I Kiss You? - Brandon Rowland Donde viven las historias. Descúbrelo ahora