Capitulo 1 - La vida de Cristal.

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[Todos los derechos reservados. No se acepta adaptaciones ni copias, derechos del autor]

Registrado.

Autora: Maciel. T.

Historia a la venta en Amazon [Version Kindle] & [Tapa blanda]

Capitulo 1 – La vida de Cristal.       

Capítulo 1 – La vida de Cristal.      

“La vida, no es fácil ni justa. Tan poco se puede entender, sólo hay que saber... Como vivirla”

–                   ¡Vamos! Levántate Leo, que llego tarde – decía Cristal intentando mover el cuerpo de su hermano, el cual no quería levantarse de la cama. Ella por su parte llegaba tarde de nuevo, y sabía muy bien que Benito, el dueño de la cafetería donde trabaja, la iba a regañar. Todas las mañanas son iguales el perezoso de su hermano no quería levantarse y ¿Cómo culparlo? Levantar a un niño de diez años a las 6:00am, era un trabajo que sé hacía cada vez más difícil.

Cristal tenía que dejarlo vestido y desayunado para llevarlo al aula matinal. Un aula que consiste en dejar a los niños una hora más temprano en la escuela. Ya que sus padres no pueden llevarles más tarde, por problemas de horario en el trabajo.

La vida de Cristal nunca ha sido fácil y aun sigue sin serlo. Cuando tenía doce años su padre murió de una borrachera que lo llevó a la muerte, pues el muy idiota en su estado, se lanzó a la carretera, siendo atropellado y muriendo al instante. Ocho meses después de la muerte del infeliz de su padre, su madre volvió a las drogas como era de esperarse. Adela le encantaba inyectarse heroína. Cristal nunca decía nada y mantenía al pequeño Leo alejado de su madre. Un día que, llegaba de la escuela la encontró intentando ahogar al niño en la bañera. Corrió asustada a quitárselo de encima. Lo único que dijo Adela, al ver como el niño tosiendo sé aferraba al agarre de su hermana fue: – Estaba sucio sólo quería limpiarlo –. Y rompió en llanto, quiso acercarse para coger a su pequeño, pero Cristal fue más rápida y la amenazo: – No vuelvas a tocarlo –. Dijo fulminándola con una mirada de odio, que quedaría grabada en su mente para siempre.

Adela, era una persona que actuaba por impulso. En ocasiones actuaba muy extraña, unas veces sonreía como loca y en otras rompía en llanto, rompiendo consigo todo lo que había en la pequeña casa. Cristal pensaba que era a causa de las drogas ya que cuando su madre no se inyectaba nada en un día, buscaba la manera de descargar la tensión que acumulaba. Algunas veces ella la golpeaba muy fuerte y le reclamaba que su padre murió porque ella no se dejó coger por él. En esos momentos Cristal tomaba al niño y se iba al parque, hasta entrada bien la noche no regresaba, no le gustaba estar en casa cuando esa mujer se ponía de esa manera.

Una noche Adela salió como siempre a trabajar y jamás regreso. Cristal se hizo cargo de la pequeña casa y de su hermano, que en ese tiempo sólo tenía cuatro años, después de que se acabara lo de comer en el refrigerador, ella les ofreció a las vecinas del condominio limpiarles las casas o lavar ropas a cambio de comida o dinero. Esa etapa duró dos años, ya con catorce y medio decidió buscar empleo. De primeras encontró una cafetería donde le ofrecieron lavar platos y limpiar mesas, era poco pago, pero al menos la mantenían ya que ella era menor y mucho no podía exigir.

Cristal en verdad lo agradeció mucho, y nunca se quejó. Después de un tiempo abandono la escuela. Le era difícil congeniar la hora de trabajo con las clases. Ya ahora, con casi dieciocho años volvió a inscribirse y lleva todo bien, como es una chica muy lista el director de la escuela la tiene en periodo de prueba, aunque no es necesario. El horario es más flexible, su hermano ya no tiene cuatro, ahora con diez años, ella lo puede dejar solo en casa con el televisor encendido y un gran plato de palomitas, hasta que regrese a casa.

Sólo... ¿Bailas?Where stories live. Discover now