Bajo esta medida, se deja claro que:

Lizeth Kathelyn Abbadie Traynor, cumplió con su juramento ante la Ley Internacional de la Organización de las Naciones Unidas y La Unión Europea. Otorgándole el cargo de Martir Policial contra el cartel Tabusso Zen. Y la suma de 83,000.00 Dólares provenientes de la resolución del caso del tráfico de personas heredados a su Madre Adoptiva y Sr. Nathanael Cassanova esposo de la Sra Bourgoeis .

Fiscalía de Francia.

Pasaron dos semanas hasta que Adrien pudo recién moverse. Sí que las había visto verde. A estas alturas sabían que ya no estaban en peligro pero lo que los mantenía tristes era que la hija de Fiorella no apareció más. Fiorella Bartolini intentó buscarla al ver el caso cerrado pero viendo lo inútil de la situación decidió simplemente desistir por un tiempo. Y volver a buscarla cuando creyera que Joel se sintiera seguro de salir a la vida matutina.

Solo bastaron unas cuantas semanas y Adrien mostraba grandes mejorías. Al final terminaron por darle de arte. Desde el acontecimiento del secuestro un año ha pasado, aunque los pequeños extrañen a Rossa Merry , la vida seguía y era hora de reintegrarse a la sociedad.

-Creo que necesitamos unas vacaciones...-dijo Adrien sonriéndole a Marinette desde la butaca de la habitación de ella- Que tal si vamos a algún lugar, algo soleado, tranquilo. Un lugar donde podamos acordar los detalles de nuestra boda...

-¿Nos casaremos? En estos momentos tan difíciles...-preguntó Marinette observando a Adrien desde el tocador donde se estaba viendo para delinear sus ojos.

-La idea no la di yo, me la dio la propia Fiorella. Dice que ella tendrá paciencia, sabe que su hija está viva...-expresó Adrien levantándose de su asiento y colocándose detrás de él. Besó con dulzura su nuca y luego la abrazó con fuerza cuando ella terminó de ponerse el labial- Te vez tan hermosa...

-Siempre dices eso, Adrien...-aseveró la azabache mirándose al espejo. El rubio tenía las manos más grandes que ella, su cuerpo de un chico de veinte y pico años era perfecto, había estado cuidando su figura en todos estos años, tanto que se tenía tantas fans como arena en el desierto.

-Lo sé, My Lady. Pero yo solo digo la verdad. La total y pura verdad. Estoy casi seguro que cualquier hombre quisiera hacerte suya. Pero lamento desilusionarlos, tú eres mía...

-¿Me estás diciendo que te pertenezco? –Marinette alzó una de sus cejas sonriendo. Mirando los ojos de Adrien a través del espejo.

-Sabes que eso es verdad. Podría decirle al mundo cuanto me perteneces en una conferencia de prensa, pero no lo hago por ti...-dijo él guiñándole coqueto el ojo, mientras ella reía delicadamente.

-Eres un tonto...-dijo él besándole la mejilla a la azabache.

-Pero soy tu tonto y solo contigo...-la abrazó fuerte entre sus musculosos brazos. La meció de un lado a otro hasta que ella comenzó a jugar con sus dedos haciendo un puchero- ¿Qué pasa?

-Hoy no irás al desfile de la tercera línea de ropa que saco para la empresa de tu padre...- Adrien la soltó y se echó a reír. La azabache a veces tenía actitudes inmaduras. Se quedó viéndola un momento mientras ella se ponía colorada de la cólera.

- Bueno, no es que no quiera ir. Estoy en la necesidad de viajar hoy. Mi padre me lo pidió, no puedo negarme...-dijo él cruzando los brazos- Sabes que mi padre está realmente preocupado por lo que pasó con Félix, no desea que el tiempo le gane. El tiempo que quiere pasar con mi hermano es mucho, no quiere perderse nada de la vida de él.

-Está bien. No insistiré más sobre este tema...-expresó la azabache con algo de desánimo- Que tengas suerte en tu viaje y llámame cuando llegues...

The Best Friends ||Adrianette||Where stories live. Discover now