15. Ibiza goals.

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Martijn P.O.V

Camine en dirección a la cocina. Había quedado pizza de la cena de hace horas y ya tenía hambre. 

Abrí la puerta y Mathias estaba sentado con la caja de pizza a su lado. 

—Te guarde un pedazo viejo. — dijo.

Negué con la cabeza, tampoco es que era tan viejo. Sólo tenia 34. 

Me senté a su lado y comencé a comer un trozo de Pizza.

—¿Sabes papá?  Creo que me gusta una chica. — comento Mathias mirándome.

Lo mire seriamente ¿Acaso mi hijo se estaba enamorando?

—Pues conquistala hijo. — hable dándole ánimos.

—Ella es diferente papá. — me dijo. — No es como ninguna otra chica. Ella tiene algo especial.

Lo mire fijamente, si.  Esa es la cara de alguien enamorado.

—Quiere ser modelo. — me dijo. — aunque es humilde.

Asenti.

—Bueno hijo, si de verdad te gusta dile.

—Eso haré. — comento sonriendo.

—Y Bueno ¿Como se llama? — pregunte curioso.

—Rose Graham. — respondió.

¿Graham?  Ese apellido me suena, pero no se donde. Quizás no tenga importancia.

Antes de regresar a la cama con Catherine le di unos consejos a Mathias, aunque creo que no los necesitaba, el sabía muy bien como conquistar. Le había enseñado muy bien para ser sincero. 

Abrí la puerta de la habitación con mucho cuidado para no despertar a Catherine quien dormía plácidamente.  Verla ahí, durmiendo tan tranquilamente me hacía que la amara cada vez más. 

Me tumbe a su lado y ella se removió un poco hasta que me abrazo. Subió una de sus piernas a la altura de mi abdomen y finalmente me quede dormido. 

Mathias P.O.V

Deje mi portátil en la mesa y mire a Rose. Los dos estábamos camino a Ibiza, ella porque tenía una sesión de fotos y yo porque tenía varias presentaciones, pero luego volveríamos a Nueva York

Rose me miró y sonrió. Su carrera de modelo despegó muy rápidamente y me sentía bien conmigo mismo. Le hice conocer al mundo una gran chica. 

—Oh Dios.. ¡Ya puedo ver la pista de aterrizaje! — chilló feliz, pero luego hubo algo de turbulencia e hizo que corriera a mis brazos.

—Venga, ya paso. — dije sonriendo.

Sus mejillas se pusieron rojas y yo reí. Me gustaba hacerla sonrojar. Los dos bajamos del avión y en el camino a la salida del aeropuerto la lluvia de paparazzis y fans cayó encima de los dos. Tome la mano de Rose y comenzamos a caminar, los paparazzis nos preguntaban cosas a los dos.  Ya me imagino los portales de chisme con «Mathias Garritsen ¡TIENE NOVIA!» 

Salimos del aeropuerto y siubimos a una camioneta que nos llevaría a la sesión de fotos de Rose.

—Eso fue de locos. — comento quitándose sus lentes de sol.

Break Through The Silence. #FV2 |Cancelada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora