¡Mi amado esposo!-Final

Start from the beginning
                                    

— No entiendo porque escogiste el acuario— Alza una ceja y suelta mi cuello deslizando sus manos por mi pecho—. Quiero decir, podemos buscar un mejor lugar para tener una cita.

Se queja como un niño pequeño, sabe que siempre cedo a sus caprichos, pero hoy va a ser la excepción. Pongo un dedo sobre sus lindos labios conteniendo el deseo de besarlo de nuevo.

— Es el lugar ideal para nuestra cita, cariño—Digo mirándolo fijamente.

Veo sus ojos brillar, parecen emitir cientos de sentimientos que son indescifrables, sus mejillas se tiñen suavemente y aparta su mirada de la mía molesto por el poder que ejerzo sobre él.

— Woonnie—Vuelve la mirada hacia mí con un adorable puchero.

Utiliza el sobrenombre que me debilita, sabe cómo manipularme, pero debo ser fuerte. Sus tiernos ojos brillan con una pizca de maldad en su interior. ¡Ay, mi ángel! . Niego de manera insistente y tomo su mano guiándolo hacia el acuario, a regañadientes me sigue y lo escucho murmurar cosas de que un hotel sería mejor.

Se muestra enojado, pero en el fondo sé que está feliz por poder estar conmigo, siempre lo está y sé que hoy no es la excepción ¿qué importa si no le doy gusto por un día?

Caminamos  por el hermoso acuario, los grandes vidrios a nuestro alrededor exhiben unos hermosos peces que no muestran mucho interés en nosotros. El exquisito ambiente parece lleno de magia, cada rincón parece un nuevo descubrimiento. Miro de reojo a Ryeowook quien  mira con poco interés los peces que se golpean con el vidrio mientras hace un comentario acerca de lo aburrido que es estar aquí. 

Me volverás loco cariño.

Pero en medio de su enojo sé que es el lugar ideal, es único ¿quién hace una petición de matrimonio en un acuario? ¡Nadie! Además, he escogido hacerlo aquí junto a mis amadas tortugas ¡Soy un romántico!

Me acercó a Ryeowook y entrelazo nuestras manos con emoción contenida, siento que el corazón se me va a salir por la boca. No puedo esperar a ver su cara de sorpresa al ver la argolla que con tanto esmero he adquirido.

 — Jong, ¿te ocurre algo?—Su voz me llama de nuevo a la realidad.

Lo miró, parece un poco preocupado y me mira de manera minuciosa. Niego suavemente y aprieto su mano enlazada con la mía.

 — No sucede nada  —Hago una sonrisa que juro se ve terrible y forzada. Aprieto la caja en mi bolsillo con la otra mano ¿cómo lo haré?

Asiente poco convencido por mi respuesta y mira a su alrededor un poco aburrido. Lo atraigo a mi cuerpo y lo beso. Aprieto su cintura queriendo que su cuerpo se funda con el mío, acaricio su espalda arrebatándole suspiros que sólo a mí pertenecen. Introduzco mi lengua en su tierna cavidad y empiezo a beber de su néctar. Acaricio sus mejillas, y dejó un par de besos más antes de separarme. Me mira como un bebé deseando más de su leche, su cuerpo tiembla entre mis brazos. Me desea.

—Muero por sentirte dentro de mí— Jadea.

Y yo dentro de ti, cariño, pero no podemos marcharnos sin antes asegurarme de que serás mío para siempre. Lo suelto y le tomo de la mano.

— Disfrutemos de nuestra cita. 

Hace un mohín molesto y empieza a caminar soltando mi mano. Suelto aire frustrado. Follón, bipolar, madrugador, manipulador, caprichoso. Ese es mi ángel.

Camino tras él y trato de entrelazar nuestras manos pero se aparta bruscamente ignorándome por completo.

— Ryeowook— Suplico.

Locuras de amorWhere stories live. Discover now