Capítulo 1

329 19 5
                                    



Abro los ojos, veo algo borroso, todo me da vueltas, froto mis ojos tal vez eso mejore mi vista. Veo mi ropa, es negra con algunas franjas azules, miro a mi alrededor, todo es muy extraño, las paredes, la cama, el escritorio y el mueble son de metal, todo es de metal, lo único que no es de metal es la almohada que está bajo mi cabeza y el colchón. Me siento en el borde de la cama, veo dos puertas y decido indagar, mis pies tocan el helado suelo, me pongo de pie, pero mis piernas tambalean un poco, me detengo en la pared en lo que logro recobrar el equilibrio, decido abrir la puerta de la derecha, camino con un poco de dificultad hasta ella, la abro, veo un baño, éste también es de metal, entro en él, camino hacía el lavamanos, enciendo el grifo, lavo mi cara y la seco con una toalla que está frente a mí. Cuando salgo del baño veo en el suelo unas botas, dentro hay un par de calcetas, me las pongo y ato las botas, camino hasta la segunda puerta, giro la perilla y la abro lentamente, saco la cabeza y veo un pasillo, alguien está sentado junto a mi puerta, se voltea y me ve sorprendido.

— No esperaba que despertaras tan pronto. — Dice el chico poniéndose de pie.

— ¿Qué? — Digo retrocediendo un poco.

— ¿Dónde están mis modales? Hola soy 499, me llaman Connor, tu eres 800, aún no tienes nombre, pero pronto lo tendrás. — Dice Connor muy sonriente.

— ¿A qué te refieres? — Digo confundida.

— Wyatt elegirá un nombre para ti.

— ¿Wyatt? — Pregunto dudosa. — ¿Dónde estoy?

— Ven sígueme.

— Ni siquiera te conozco. ¿Dónde estoy?

— Si quieres saberlo sígueme.

Me limité a observarlo con un poco de miedo.

— Si quisiera dañarte ya lo habría hecho. ¿Vienes o no?

Asentí con la cabeza y lo seguí por un largo pasillo, bajamos en un ascensor y salimos a un enorme jardín, allí había muchas personas reunidas, todos me miraban con curiosidad. Seguí a Connor entre la multitud, me llevó hasta una especie de escenario, un hombre está parado justo en medio mirándome muy atentamente con una enorme sonrisa.

— Bienvenida 800, mi nombre es Wyatt, acércate.

Caminé con des confianza hasta aquel hombre con barba canosa.

— No temas, no te haremos daño. — Dice con una voz cálida.

Todos me observan, mientras gritan y silban.

— Silencio. — Dice el hombre y todos hacen silencio de inmediatamente.

Otro hombre se acerca a mí y me pone una maquina en la parte posterior de la muñeca, siento mucho dolor, trato de quitar mi muñeca de allí pero el hombre no me lo permite, segundos después quita la máquina de mi muñeca y puedo ver tatuado mi número.

Todos celebran y no entiendo por qué.

— Silencio. — Dice nuevamente el hombre. — Ya que eres la última recluta te pondremos un nombre muy especial. Un nombre que nos hará volver a creer que podremos salir de aquí, tu nombre será Hope. ¿Qué dices?

— Sí. Me gusta. — Digo tímidamente.

— Ahora, Hope, pasaras un día con cada división y cuando pases por las 4 elegirás una para ser parte de ella. ¿Comprendes?

— Sí.

— Comenzaras mañana, debes reportarte con los agricultores.

Asiento con la cabeza y veo a los representantes de cada área, todos me sonríen, menos uno, él está serio viendo hacía el frente sin hacer contacto visual conmigo.

Hope: La Última Esperanza ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora