Sebastian Vettel es piloto de Red Bull por segundo año consecutivo tras luchar por el campeonato el año anterior.
Red Bull decide que lo mejor para el es añadir una nueva voz que le guíe en esta nueva temporada y ahí es donde Maria hace su aparición...
Me desperté abrazada a Jaime, estaba aun claramente dormidito. Me encantaba. Podría estar horas mirándolo, todo en el me parecía perfecto. Me levante con cuidado, tratando de no despertarlo y me metí en la ducha. Me arregle lo mas rápido que pude y le deje una nota a Jaime para que supiera donde estaba. Salí de la habitación, tratando de no hacer ningún ruido, y me acerque a la de Seb, esperando que estuviera despierto.
-Seb, estas despierto?-dije yo llamando a la puerta.
-Si, salgo en un segundo-grito el.
-Y si no gritas para no despertar a todo el hotel?-dije yo.
-Vale!-grito el aun más fuerte.
Que vergüenza me hacia pasar este chico. Lo hacia ya a propósito.
-Buenos dias-dijo el besando mi mejilla.
-Que verguenza me haces pasar-dije yo.
-Bueno, debo suponer que leiste mi carta, no?-dijo el.
-Si, esta sobre mi cama-dije yo.
-Y eso? No dormiste esta noche ahi?-dijo el.
-No, dormi con Jaime-dije yo sonriendo
-Eso es que te fue bien ayer?-dijo el.
-Si, somos oficialmente novios-dije yo.
-Ay María, que alegria me das. Enhorabuena-dijo el abrazandome.
-Gracias-dije yo-Cambiando de tema, tenemos que ir a por el sobre a mi habitación.
-Yo quería que me contarás lo de la cita-dijo el.
-Anda...vamos a por eso-dije yo riendo Entre en mi habitación para coger el sobre y bajamos al vestibulo para salir fiera del hotel y acabar en su coche. No tardamos en llegar al circuito y nos adentramos en el paddock. Al ser relativamente temprano estaba bastante vacio asi que caminamos a nuestras anchas al motohome. Seb me dijo que tenia que hacer una paradita asi a que me dijo que subiera a la habitación y me pusiera comoda. Abri el sobre y saque la lista que el me habia dado y la repase para saber de que teniamos que hablar.
-Ya estoy aqui, no estaba muy seguro de que lo que sueles desayunar pero te traje esto-dijo el
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-Madre mia, menudo desayuno. Y ademas con el hambre que tengo, gracias-dije yo besando su mejilla.
Mientras yo tomaba mi desayuno nos pusimos manos a la obra, no habia tiempor que perder. La verdad es que fue bastante rapido ya que como eran dudas muy concretas eran mas faciles de resolver.
-Hemos acabado antes de que termine mi desayuno-dije yo riendo.
-Es que comes muy despacio-dijo el.
-Lo que tu digas, quieres?-dije yo acercandole el vaso.
-Café para antes de una carrera? No gracias-dijo el.
