Poemas De Ella

Adios

Ya nada es como antes, he notado que cambie totalmente.

Me cuesta creer lo que me ha sucedido, me cuesta creer que
ahora no sonrió de felicidad sino por aparentar que me encuentro
bien, intentar estar con una persona cuando me acostumbre a
estar solo, dar afecto a una persona cuando en realidad me siento
vació.
Sin duda alguna me gustaría llorar, llorar de felicidad o de
dolor no importa cual de las dos sea, quiero sentir las lágrimas
deslizarse por mis mejillas, sacar de mi todo aquello que me hace
daño.
¡MALDICIÓN!
Es horrible que tener que sentirse así...

Siento mi alma nublada, en una zona perpetua, es como un río
sin calma que no encuentra respuesta.
Ya no hay razón para vivir,
para cantar, para reír no simplemente ya no la hay, tampoco hay
perdón, no hay consuelo y en una tempestad naufragó mi sueños.

Pierdo ya la esperanza, aunque este buscando no la podre hallar
bajo esta montaña solo hay mas que soledad, estoy enfermo de
venganza no hay mañana, nada ya vale la pena, soy un alma muerta,
mi dolor es mi condena.

No quiero tener nada con nadie, yo con el frío me doy abrigo, esta es
la realidad en que vivo, y duele cuando se pierden seres queridos, la
calle a mi me llama, pero no esta en mi destino que tome la venganza
y me convierta en asesino.
Tengo muchas cosas por hacer para
cumplir una miserable promesa, se lo que prometí pero no la quiero
cerca mio, tenerla cerca es como si me atravesaran cuchillas por mi
cuerpo, y esto duele como los mil demonios, nunca debí enamorarme
de nadie, sabía lo que me esperaba pero lo ignore y me arriesgue.
¡JODER!

Solo quiero decir que lo siento, tomare mis cosas y adiós.
Total, a nadie
le interesa si no estoy, también are borrón y cuenta nueva, pero
probablemente si me quiso, vaya uno a saberlo, pero lo cierto es, que
tenia una habilidad espacial para herirme.
Y nose porque pero hoy me
dio por extrañarla, por echar de menos su presencia.
Seria tal vez porque
el primer amor deja mas huellas que ningún otro, puede ser, lo cierto es
que aveces tratar de ser fuertes, nos hace olvidar que no lo somos.