Día 5

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Día 5:

Paloma: <Ayer salí con el camarero de aquél bar... me besó...>.

Aquél era el mensaje que tenía cuando volví de correr aquella mañana.

Yo: <¿Tiene algo de malo que te besara el chico?>

Paloma: <Me enfade. Ha ido demasiado rápido>.

Yo: <¿No has pensado que tal vez le gustas?>

Paloma: <Pero yo le dije que quería ir despacio...>

Yo: <No le veo lo malo a que te besara. ¿A caso no te gustó?>

Paloma: <No es eso...>

Yo: <¿Entonces?>

Paloma: <No quiero ilusionarme con nadie, al menos de momento.>.

Yo: <Pues creo que ese chico conseguirá ilusionarte. Dale una oportunidad>.

Paloma: <Dásela tú a Claudia :)>.

Yo: <Te tengo que contar...>

Paloma: <¿¡Has vuelto con ella?! ^.^ >.

Yo: <No, pero ayer quise besarla>.

Paloma: <No le veo nada malo #ImitandoAAdrián>.

Yo: <Idiota :)>.

Yo: <No quiero hablar de esto por WhatsApp>.

Paloma: <En diez minutos en el bar del otro día>.

Yo: <Ahí estaré. Espero que también esté tu Romeo>.

Paloma: <Calla idiota ¬¬>.

Me vestí y fui hacia el bar, encontrándome a Paloma en la puerta. La saludé con dos besos en las mejillas y entramos dentro. Nos sentamos en una mesa y pedimos las bebidas mientras nos pusimos a hablar.

-Bueno, cuéntame, ¿qué pasó con el chico del bar? -pregunté curioso.

-Tú sabes que me dio el número y eso, ¿no? -asentí. -Pues ayer quedamos por la tarde para ir a tomar algo y dar una vuelta a ver cómo iba todo. Al principio todo iba genial hasta que, cuando me iba a ir, decidió besarme y lo fastidió todo -explicó mi amiga.

-¿Fastidiarlo por qué? ¿No te gustó?

-No es eso. Gustarme me gustó pero -resopló antes de seguir hablando -no quiero ilusionarme con alguien y que después solo sienta atracción por mí, ¿sabes? No quiero dar el paso a poder ser algo más que amigos sin estar segura de lo que quiero.

-Entiendo -aseguré. -¿Y qué hiciste luego de que te besara?

-Me enfadé y le dije que me dejara en paz, que ya le hablaría cuando se me pasara el enfado -me contestó a lo que yo solté una carcajada.

-Sabes que acabaréis juntos, ¿verdad? -le pregunté sonriendo.

-Y tú sabes que acabarás volviendo con Claudia, ¿verdad? -me sonrió de igual manera a lo que me encogí de hombros. -¡Por cierto, cuéntame qué pasó! -añadió entusiasmada.

-Pues nada, que ayer estábamos en su casa y la abracé yo ¿entiendes? ¡La abracé yo y no debería! -exclamé a lo que ella solo sonrió.

-¿Y sentiste algo al abrazarla, verdad? -preguntó con una sonrisa triste y supe que era por mi culpa por lo que me sentí mal. No me gustaba nada que Paloma sufriera y menos por mi culpa. Ella se merecía ser feliz. Supongo que al ver la expresión de mi rostro supo que estaba en lo cierto y que no quería incomodarla explicándole lo que siento al abrazar a mi ex. -Puedes ser sincero conmigo. Cuéntame qué sentiste -sonrió levemente.

Te doy diez días (1.5 Diez días)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora