El Príncipe de las Rapsodias

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Dicen que esas tierras están mucho más lejos de lo que llega la luz del sol. En aquellos lugares tan desolados e incluso los abandonados olvidados del ala de Celestia, se rumorea de la manera más insípida e inconsciente. Que aún quedan los vestigios de un alguien que ha sido consumido totalmente por la locura, ese pequeño fallo en la cabeza de alguien que desemboca un completo mar de imperfecciones y de incluso malas situaciones que pueden llevar como consecuencias hasta la misma muerte.

Pero se sabe que incluso la muerte teme llegar a esas tierras que desde luego son un territorio donde se duda de su procedencia. Su origen es el misterio más codiciado que alguna vez existió, porque una vez que se comprendían las raíces de esos lugares, podrías dar por sentado que lo sabias todo de este mundo. A pesar de estar plagado de un bosque lleno de criaturas horripilantes llamadas lobos del bosque, o parásitos destructores de todo lo que tengan en su paso conocidos como los Parasprites, moviéndose de un lado al otro como los demonios que solo traen ruina y perdidas.

Esos misterios estaban resueltos, salvo por uno, por ese último lugar perdido de toda línea de lógica, donde la belleza germina con total calma, las aves producen su bello canto al unísono de un amanecer, la suave briza de verano acaricia delicadamente las copas de los árboles para que estas se sacudan en un solo sonido de paz. La apariencia de estos dominios era más que hermosa para los ojos de cualquiera. Más su propio custodiado es todo lo contrario. Hablamos de alguien sin ningún toque de paz en su interior, los delicados sonidos que el amor produce lo han abandonado al notar que nunca podría alcanzar la dicha de la misma felicidad, lo cual no le permite morir, ya que su alma es repugnante para el creador que habita en los cielos o para el traidor que habita en el averno. Ambos tienen un desdén profundo, así que de forma preferible se le concede la maldición de la eternidad.

No han faltado los curiosos que tratan de hallar la respuesta de ese mítico lugar y su espeluznante gobernador. Intentan mediante libros y libros, mediante estudio incesante y sacrificando su propia vida social para intentar llegar al fondo de aquello que debe ser secreto. A estos ponys curiosos, la misma alicornio que se digna a levantar el sol, no le queda otra alternativa que solo aplicar esa mágica tan repulsiva para deshacer la memoria de todo aquel que se pregunte por aquellas tierras que deben estar olvidadas para siempre.

La intención de todas maneras jamás ha desaparecido, la verdad siempre tiene que salir a luz a final de cuentas. Son esa clase de filosofías universales que solo sirven para darle confianza a uno mismo pero que jamás funcionan de ninguna manera.

Es triste pensarlo, pero es desgarrador vivirlo.

No sabíamos el nombre del individuo que se encontraba en esa condena (Que no se sabía si era una bendición o una maldición) Pero el punto es que el mismo pony se encontraba en su propia miseria.

Era una mañana de lo más hermosa, las nubes eran gigantescas, pero no lo suficiente como para impedir los rayos del sol, la princesa Celestia no tardo nada en hacer su trabajo. A los pegasos se les debería dar el mismo reconocimiento, rara vez al año ellos generan nubes de ese tamaño que proveen de la sombra más placentera que jamás se podrá encontrar en algún lugar. Las corrientes de aire traían consigo mismo unos cuantos breezies que proveían alimento a los suyos, además de que su migración estaba demasiado cerca.

En ese lugar tan extraño se hallaba un castillo en ruinas. Era una belleza arquitectónica, realizada por más de 100 escultores que trabajaron en perfecta sincronización, de un color amarillo que causaba una especie de similitud con el amarillo que rara vez notas en una flor. Colocado en medio de una gigantesca pradera, pero sin nadie por sus alrededores. La misma estaba cercada únicamente por flores muertas, rosas marchitas y restos de tulipanes que ya han sido devoradas por insectos. El castillo mismo por dentro era una obra de arte, la última construida alrededor del siglo Xll, sus mismas salas estaban hechos de materiales demasiado finos...lastimosamente estos mismo se han deteriorado gracias al cruel paso del tiempo.

El Príncipe de las Rapsodias  #Wattys2016Where stories live. Discover now