II

6 0 0
                                    

Solíamos andar en bicicleta por las calles del pueblo,
solíamos correr a casa antes de que se apague el cielo.

Solías estar todo el tiempo aquí,
creamos nuestro propio mundo entre pelotas, rayuelas y juegos sin fin.

Nunca confesé esto pero fuiste mi único amigo,
por alguna razón nadie quiso estar conmigo salvo a ti.

Me dejaste también,
y aunque no lo quisieras admitir,
noté que nuestros compañeros reían de mi.

Lamento haberte hecho pasar vergüenza,
se que nunca fui el amigo que querías.

Admito que me dolió que te fueras de un día para otro,
tambien todas esas veces que llamé a tu puerta y me contestaban que tu no estabas.

¿Notabas que tus rizos oscuros se escapaban detrás de la cortina?

En fin, gracias por defenderme aquel día,
antes de que notaras que yo no era como vos.

Siempre quedara en mi cabeza el recuerdo de ese amigo,
el primero,
que cometió un error pero si volvía perdonaría sin dudar.

Lastima que no lo hayas hecho.

Silencio de un alma en penaWhere stories live. Discover now