Dos pescadores salieron una noche con la ilusión pescar para el día siguiente poder comercializar mientras navegaban su lancha de repente fueron sorprendidos por una fuerte tormenta huracanada que hizo que volcara la pequeña lancha ahogandose uno de los pescadores, pasada la tormenta comenzó a amanecer el sobreviviente a lo lejos observo una isla, hasta la cual pudo nadar,
El naufrago era cristiano y oró diciendo: señor yo confío en ti ven y sacame de este lugar, quiero testificar de tu grandeza, pasando unos días apareció un crucero y al verlo le arrojaron un salvavidas, pero no lo quiso y les dijo: ¡No gracias Dios vendra y me salvará!
Pasando otros días apareció
un helicóptero y le arrojó una escalera mientras lo invitaban a subir pero no quiso, diciendo: ¡No gracias Dios vendrá y me salvará!
Luego aparece un hombre en moto acuática y se ofrece a llevarlo pero tampoco quiso sino dio la misma respuesta,
Este hombre sin agua ni comida a los pocos días murió y llegando al cielo busco a Dios y le dijo: Dios yo confiaba en ti, y me fallaste, respondió Dios
¡No te falle!
Te mande un crucero y lo despreciaste, te mande un helicóptero y lo despreciaste te mande una moto acuática y también lo despreciaste, quien crees que los envió,
Moraleja:, Una oportunidad perdida es una bendición sin aprovechar que en algún momento hemos solicitado,
(mi padre solia decir como esta escrito en la biblia: Dios dijo ayudate tu primero y yo también te ayudare)
Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.
Isaías 41:13
Robin Alexander.
ESTÁS LEYENDO
El Gran Alfarero. 10
SpiritualA los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia. Deuteronomio 30:19
