Capítulo 5 "Si no fuera porque estas mal, te pegaría"

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-¿Cual? - Pregunto yo.

-La de que tendrá una novia mas guapa que tu - Responde el.

-¿Y eso? - Vuelvo a preguntar yo.

-No existe aún nadie mas guapa que tu, tal vez, algun dia, nuestra hija, pero de momento, olvídalo - Dice mientras me acerca a el.

-Eres tan idiota - Digo yo sobre sus labios.

-En el fondo sabes que te encanto - Dice antes de acabar con el espacio que nos separaba y besarme.

-Eh, ¿que te ha pasado? - Pregunto yo.

- No lo quieres saber - Dice el

-Oh, si lo quiero saber, estoy completamente segura - Digo yo.

-Prometeme que no te vas a enfadar, enserio - Me pide el.

-Vale, te lo prometo, no me enfado - Le digo yo

-Discuti con Trevor, y cuando se fue, me entro la rabia, le di un puñetazo a la pared y me rompí la mano por 4 lados diferentes - Dice el mientras observa su mano dolorida.

-Tyler, si no fuera porque estas mal, te pegaría - Le respondo yo.

-Sabes que me quieres - Me dice el.

-Muy poco, en fin, ¿cuando te dan el alta? - Le digo yo.

-Dentro de 3 horas - Responde el.

-Eso es genial, porque asi puedes venir a ver mi casa nueva, mis padres no van a estar en toda la noche, bueno, realmente no les veré en bastante tiempo - Digo yo.

De que sirve que tus padres esten podridos de dinero, ¿si no lo podéis disfrutar en familia? Ellos creen que el dinero arregla la falta de afecto, pero esas cosas no se compran. Mis padres siempre estan viajando, a veces son dias, otras veces semanas, otras incluso meses, para que al volver, solo traigan mas dinero. A veces me gustaría tener una família normal, que nos quisieran, y estuvieran con nosotros, pero esta complicado.

-Estaré encantado de ir a tu casa muñeca - Me dice el.

-Que no me llames muñeca - Le digo yo.

-Lo siento muñeca - Me responde el.

Le pego levemente en el brazo a lo que finje dolor.

-Bueno, ¿y que tienes pensado hacer hasta esta tarde? - Me pregunta el.

-Cuidar a mi moribundo novio - Le respondo yo.

-Me parece bien - Dice el.

-Ahora vengo, no te portes mal - Digo yo mientras le doy un beso en la mejilla, cojo el saquito y salgo de la habitación.

Tengo que comprar comida para nosotros, odio la comida de hospital. Justo enfrente hay un restaurante chino, genial.

-Hola, bienvenidos al dragón de la suerte, ¿qué desea tomar? - Pregunta una chica en cuanto me ve.

-Hola buenas, dos raciones de arroz tres delicias, dos de ternera al curry, una de tallarines, otra de salteado de champiñones huang, y dos refrescos, porfavor - Digo yo.

Un Infierno Llamado BerkleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora