Sólo quiero ser tuyo (Saúl Ñiguez)

Capítulo 5

El día de la final, 28 de mayo de 2016. El Atlético y el Real calientan. El partido comienza.

Minuto 15, y llega el gol de Sergio Ramos, los colchoneros se dejan la piel pero de nada les sirve, hasta que en el minuto 79 Yannick marca un golazo que le da la oportunidad de poder ganar el partido a los atléticos. Pero todo deja de tener sentido para ellos cuando llegan a los penaltis, Juanfran lo falla y el bicho acierta de lleno en la red. 11 veces campeón el Real, dejando sin ninguna vicotria en esta máxima competición al Atleti.

Todos los jugadores del atleti estan destrozados. Me acerqué a Juanfran, era el más afectado.

-Juanfran...Lo siento muchísimo, esta era vuestra oportunidad...

-No te preocupes.

-Voy a entrevistarte, con tu permiso.

-Sí, sí.

-Hola, os hablo desde San Siro, estoy aquí con uno de los protagonistas de la noche. Juanfran Torres, ¿cómo te sientes después de haber fallado ese penalti?

-Culpable, muy culpable de no haber podido darles la champions a todos nuestros aficionados. Sé que ellos me animan, pero no puedo evitarlo, me disculpo.

Empezó a llorar.

-Cortad, cortad por favor, no quiero que le vean así.-Le abracé.

-"Que estén tranquilos, que volveremos a jugar una final de champions." Eso lo dijiste tú, Juanfran, y ahora te lo digo yo, verás a Gabi levantar una copa de Champions, ya lo verás.

-Muchísimas gracias, Míriam.

Saúl estaba destrozado, era hora de pedirle perdón. Me acerqué a él, y le abracé por detrás.

-Saúl, lo siento...

-Míriam...-Me miró con los ojos llenos de lágrimas.-No...no puede ser...

-Habéis demostrado superioridad, aun que el árbitro no diga lo mismo, ya llegará vuestro día Saúl.

-Soy una mierda Mimi, una mierda. No soy capaz de conquistarte, ni de jugar bien, ni de concentrarme, soy una puta mierda...

-¿Que no eres capaz de conquistarme? Mis bragas cada vez que te veo no dicen lo mismo, puedes tocarlas que están mojadas, te lo aseguro, me encantas Saúl, para mí eres una debilidad, pero no puedo descentrarme de mis prioridades, y los chicos no lo son.

No dijo nada, sólo me besó, pero me aparté.

-Saúl, esto puede crear muchas polémicas. Toma mi número, llámame cuando puedas. No tardes mucho.

Le guiñé un ojo y me fui del campo, tenía que volver a España lo antes posible.