Vampire Academy_Dimitri

Más que una simple broma

Tan irracional como era, había una preocupación en la boca del estómago que crecía. ¿Y si de alguna manera sabía de mi sueño...?. Ese sueño totalmente inapropiado, pero completamente intoxicante. Tal vez mi miedo no era totalmente injustificado. Sabía que Rose podía leer la mente de Vasilisa y saber lo que sentía ella en cada momento, es cierto que compartían un vinculo pero no sabían qué lo causó. ¿Era posible que de alguna manera leyera mi mente?. Ella ya tenía una extraña habilidad para ver a través de las paredes que he construido durante los años a mi alrededor.

Llegué a la manivela de la puerta que separaba la escalera, del pasillo donde se hallaba Rose y la matrona. Tomé una respiración profunda antes de abrir la puerta, mientras ponía las máscara de guardián. Rose estaba de pie junto a la mesa, completamente vestida, pero con signos claros de sueño. Manteniendo mi nivel de voz, la interrogué con solo una palabra.

"¿Lissa?". Rose asintió.

Me di la vuelta, dejando escapar un suspiro de alivio que había estado conteniendo inconscientemente. Empezamos a bajar las escaleras, podía oír a Rose siguiéndome. Quería saber más detalles pero estaba seguro de que no iba a obtener la información que quería hasta que no llegáramos a los dormitaros morois.

Cruzamos el patio en silencio, pero me pregunté por qué me había llamado Rose a mi primero. Sabía que podría haber conseguido llegar donde Lissa a escondidas, sin embargo no lo había hecho desde que regresó a la escuela... o por lo menos no ha sido capturada haciéndolo. Sólo había dos razones por las que podría haber ido por el camino correcto esta noche. En primer lugar, que no tenía otra opción y en segundo lugar, que finalmente estaba madurando lo suficiente como para respetar las reglas. Tenía la esperanza de que fuera esto último, no estaba totalmente convencido. De cualquier manera, una parte de mi estaba orgullosos de que confiara en mi lo suficiente como para llamarme cuando necesitara ayuda. Miré hacia ella a medida que avanzábamos, reprimiendo una sonrisa.

Rose se envolvió más con su sudadera, sin darse cuenta de mi mirada mientras se protegía del aire frío. Cerró los ojos, inclinó la cara hacia el sol y disfrutó del momento. Entendí sus pensamientos, aunque no los expresara. Dado que muchos morois vivían una vida nocturna, nosotros como sus guardianes teníamos que llevar su mismo estilo de vida. Aun así, la mitad humana que teníamos anhelaba la luz de sol. El viento soplaba una suave brisa que nos rodeaba, por lo que su pelo suelto se movía y dejaba al descubierto su pequeña sonrisa y tenues reflejos. Era tan hermosa... Aparté la mirada, resistiendo el impulso de tocar un mechón.

La distancia no fue muy larga, pero caminamos a un ritmo bastante rápido y llegamos a los dormitorios pronto. Se sorprendió la matrona del pasillo al vernos, pero con mi presencia no dijo nada. Rose se puso en cabeza mientras nos dirigíamos a la habitación de Lissa. A medida que nos acercábamos a la puerta, Rose finalmente habló.

"Está en los servicios". Rose se dirigió rápidamente al baño.

Me detuve, sabiendo que tal vez necesitaban un momento de privacidad, sin embargo, la matrona tenía intención de seguirla.

Rose extendió su mano para detenerla. "Está demasiado turbada. Déjame hablar con ella primero". Su voz sonó muy segura y con autoridad. Había preocupación en su tono de voz.

Cuando la matrona vaciló, decidí intervenir. "Si, concédales un minuto".

Rose hizo un gesto de agradecimiento antes de abrir la puerta. "¿Liss?". Oí un pequeño sollozo de mi cargo cuando la puerta se cerró detrás de mi estudiante.

Después de unos minutos de silencio, llamé a la puerta. "¿Rose?".

"¡Sólo un segundo!" oí el grito de Rose.