𝗔𝗴𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗜𝗻𝗳𝗶𝗹𝘁𝗿𝗮𝗱𝗮 / ʲᵃᵐᵉˢ ᵐᵃˢˡᵒʷ

Capítulo 1 | The Change

Hoy era un día como todos los demás, el sol brillaba, los pájaros cantaban... y, como la guirnalda de la torta, todos ignoraban a 'La nerd'. No me gusta mucho este papel que he estado interpretando desde hace ya tanto tiempo... (el de 'nerd') pero sé que sentiré una gran satisfacción al ver a Henderson tras las rejas.

Ya hace tres años que he estado persiguiéndolo sin descanso alguno, y tengo que aceptar que él es demasiado escurridizo. Además de que necesito pruebas si quiero meterlo a prisión. Pero, Henderson es impecable. En los 25 homicidios y 41 robos de todo tipo, no ha dejado huella ni prueba de que él estuvo allí.

Hace tres años mis superiores me informaron sobre la entrada de Henderson a esta universidad. El caso apenas llevaba algunos meses cuando me inscribieron en ésta, con el pensamiento en mente de tal vez aumentar las posibilidades de atrapar al astuto Logan Henderson, pero repito: es impecable.

El reloj ya casi marcaba el final de mi tiempo en el caso, junto a la conclusión de mi vida en esta universidad. Si no atrapaba a Henderson, me sacarían del caso y de la universidad antes de llegar a cumplir mi meta, y a mi nunca me sacan de un caso. Soy la mejor en la Agencia.

Jamás un asesino a escapado de mi,
jamás he perdido un caso,
y eso jamás pasara.

Soy la más inteligente, ágil, astuta, valiente y según Carlos, mi asistente, hermosa. El moreno es mi mejor amigo y la única persona en la cual confió, el pequeño detalle y tal vez defecto de nuestra amistad es su obsesión conmigo, su enamoramiento es bastante molesto e incomodo para mi persona. No se ha rendido, es bastante astuto pero referente a este tema... realmente no ha sido lo suficientemente inteligente como para aceptar que mi rotundo 'no', no iba a desaparecer así como así.

Tenía una idea para por fin atrapar a Henderson, el Plan B. Era la primera vez que ejecutaba un plan B, jamás me servían de nada y siempre pensé que eran inútiles, pero esta era mi única opción.

Hoy seria el momento perfecto para poner mi plan en marcha, harían una fiesta y eso era lo único que necesitaba.

El plan consistía en que yo, la 'nerd', iría por primera vez a una fiesta, justo a esa en particular... pero yo me vería 'diferente', como si... fuera otra. Luego todo estaría sobre ruedas. Por lo que he investigado sé que a Henderson le atraen mucho las mujeres, y eso era de gran ayuda para mi y para mi plan.

Cuando llegue a la fiesta yo ya no seria una nerd, llegaría como una chica totalmente distinta. Volveré a ser yo, o algo parecido...

No me puse los molestos lentes que ni siquiera necesito, aunque si tuve que ponerme unos de contacto... les explico: mis ojos son azules, pero la Agencia dijo que lo mejor era que para no llamar la atención, que pareciera una chica como cualquier otra, con ojos de color marrón oscuro.

Continuando con lo que decía: estoy usando un vestido rojo muy ajustado que me llega más arriba de las rodillas, me coloque unos tacones que combinaran con el vestido y me maquille hasta que quede más perfecta de lo que ya estaba.

Ya había llegado a la fiesta hace minutos atrás y sólo faltaba que llegara mi presa. Hoy lo atraparía, de eso no cabía duda.

De pronto mi teléfono sonó, sacándome de mis pensamientos. Conteste sin siquiera mirar la pantalla, sabía que era la única persona que me llamaba (por ser una nerd no tengo una vida social muy activa) era Carlos.

-Durante la Llamada-

—Hola —saludo mi asistente—. ¿Cómo te va con el Plan B?

—Excelente, todos aquí me están mirando y se que lo dejare sin palabras. —presumí.

—Por favor cuídate, y no dejes que ese miserable te ponga las manos encima...

—Carlos, sabes que este es mi trabajo. Sé lo que tengo que hacer y si quiero terminar con esto tendré que dejar que... —no me dejo terminar.

—¡No lo digas! No quiero saber lo que sea que vayan a hacer. Llámame cuando tengas alguna pista. —y colgó.

-Fin de la Llamada-

Odiaba cuando Carlos se ponía celoso. Pero ya después se le pasará.

Para hacer la fiesta habían alquilado un bar-restaurant. Yo me había sentado en la parte del bar, conocía bien a Henderson, él vendría aquí en cuanto llegara.

Así pasaron las horas. Varios chicos me invitaron a bailar pero no acepte, otros intentaban invitarme alguna bebida pero igual que con el baile me negué completamente a sus atenciones. Para no aburrirme comencé a jugar con mi teléfono... pero paso otra hora y aun no había rastro de Henderson. Empezaba a creer que no vendría. Finalmente me rendí y quise irme, pero antes de siquiera levantarme de mi asiento escuchó su voz...

Con mi excelente oído y viendo el reflejo de los vasos y botellas frente a mi logre divisar a Henderson en la entrada del lugar, y venia hacia acá. Y una idea se me vino a la cabeza...

Espere aproximadamente 25 segundos y me levante, quise seguir pero choque con alguien...

«¡Si! ¡Lo conseguí!». Celebre para mis adentros. 

Con solo una mirada lo tendría. Maldije para mis adentros al notar que fallé torpemente. Esos ojos pardos no eran los que yo buscaba... Caer en los brazos de uno de los mejores amigos de mi verdadera presa no entraba en mis planes, creo que hasta arruinaba todo.

Como parte de mi trabajo, he investigado a cada estudiante, profesor u personas que integran esta universidad. Así que conozco a este chico como si fuéramos amigos cercanos. Al igual que Henderson, era uno de los populares. Él es el capitán del equipo de Fútbol Americano de nuestra universidad. Alto, cabello castaño y con un cuerpo bastante atlético... Al momento de mi investigación al castaño, no dude ni un segundo que traía a las hormonales jóvenes mujeres de las instalaciones babeando, y realmente no me equivoque. Su nombre era James Maslow.

Me alegraba de que mi cerebro maquinara tan rápidamente, al maquinar todo aquello en tan solo segundos. — L-lo siento, yo... no quise... —yo actuaba realmente bien. Parecía que lo sentía de verdad. Reí para mis adentros, notando en sus avellanados ojos la diversión en su mirada, acompañada de la inocente mirada de un iluso, al creer en mi falsa actuación.

—No, tranquila, fue mi culpa. —sonreí sin mostrar mis dientes en respuesta. No fue sorpresa ver que me respondió enseñando su blanca sonrisa, y sin saber realmente la razón no evité copiar su extrañamente dulce gesto.

Mi cerebro maquinó brillantes ideas en esos pequeños instantes donde el silencio crecía entre ambos, pese a que la fiesta a nuestro alrededor se haya convertido en un verdadero desastre la sentí bastante lejana por algunos instantes. Tenía el plan perfecto y no dudaba que mis ojos brillaban de la emoción.

¿Qué tal si no coqueteaba con mi gran enemigo Logan Henderson, sino con él? ¿Y qué hay si me acercaba primero al mejor amigo de Henderson?

No era una mala idea, yo no tendría que coquetearle tanto a Henderson..., Carlos no explotaría de celos al intentar 'progeterme'...

Si, decidido. Le haré unos cambios al plan B.