Capitulo #67

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Miércoles.

Cuando Ann, James y Venecia llegaron a la secundaria sintieron mucho alivio al saber que la rubia había sido suspendida estos últimos días  de la semana de venir a la secundaria. Pero lo que les sorprendió fue que ese mandato fue dicho por el padre de ella misma.

-Pelirroja habla-hablo hiperactiva la de ojos azules.

-¡Cállate! Que estamos en clases-hizo un ademán con la mano- será tu culpa si me colocan en detención.

-¡Vamos! ¿Desde cuando te importa a ti la secundaria?-cuestionó en un murmuró cruzándose de brazos.

-Desde que desaprobé el examen de historia-bufo con mal humor- qué suerte que tiene James al sentarse en la otra punta de la sala.

-¡Ey! No soy tan molestosa-se quejo Ann mientras mira como el profesor escribía y escribiría en el pizarrón.

- No lo eres-al oír eso Ann sonrió- eres un grano en el trasero.

La de ojos azules abrió la boca ofendida, miro a donde James que se encontraba concentrado a lo que decía el profesor. Así que se quedo hipnotizada, ama su perfil, podía observar sus rasgos  finos y hermosos.

Ann sabía que no había significado para la perfección, pero en su cabeza y su mundo si había uno y es James.

La pelirroja volteo a ver a su amiga, la cual se encontraba examinando a James por cuarta vez en la mañana.

-En este paso Ann desaprobara todas las materias-Pensó Venecia

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Si pudiera describir lo que está pasando ahora es aburrimiento. No tenían nada que hacer. Cuando llegaron a la casa de Ann, solo se concentraron en hacer sus deberes para el día siguiente. Pero cuando terminaron se dieron cuenta lo aburridos que están.

-Se me ocurrió una idea-Venecia sonrió al saber que es la única de ellos, que se le ocurre algo.

-Dinos-James la miró atento, ya que cualquier cosa podía venir de esa cabezota que tenía la pelirroja.

-Vamos al bosque y prendemos una fogata-hablo.

-¡Si! Podemos ir al lago-hablo entusiasmada Ann.

James sonrió al ver a su novia contenta así que aceptó.

Empacaron para comer y una manta. Fueron al auto y James se encargó de manejar hacia el bosque más cercano. Estaciono el auto dejándolo a la entrada del bosque.

Se adentraron dentro de el, caminan encontrándose con árboles y más árboles. Pero a los chicos lo que les gusta era los sonidos de los pájaros, es un sonido tan delicado, era un silbido que lo colocaban en una tranquilidad potente.

-Este lugar, es para alguien que busca paz-hablo Ann caminando con cuidado tratando de no tropezar con alguna rama de un árbol.

-¡Exacto!-río- Eso mis queridos amigos necesitamos nosotros-dramatizo la pelirroja.

Todos necesitamos paz en esta cruel y asquerosa vida, pero La Paz dura poco, así que solo queda aprovecharla.

Mi mejor amigoOù les histoires vivent. Découvrez maintenant