❝IDIOTA❞ 「EunHae」

El pequeño afeminado

Salí de la oficina del director azotando la puerta. ¿Qué creía? ¿Por sólo ser amigo de mis padres yo haría lo que a él se le viniera en gana? ¡Já! Sí, claro. Mi relación con mis padres hace mucho que había dejado de ser buena.

Ya sé lo que están pensando... "Seguro es el típico chico malo". Pues, no. Pero tampoco es que sea un santo. Sólo me gusta tener buenas calificaciones para que los profesores no me molesten y ya.

Hubiera entrado a mi salón pero estaba tan enojado que seguramente le salía grosero a alguien y yo no quería problemas, además no faltaba mucho para el receso.

Ingresé a los baños y me paré frente al espejo. ¡Demonios! Parecía que se me iba a ser un hueco en la cara de tanto fruncir el ceño. Suspiré y abrí la llave de agua para mojarme el rostro. Tomé una toalla de papel y me seque sin delicadeza.

Me miré una vez más al espejo y acomodé mi castaño cabello. Un color bastante inusual en mí ya que siempre usaba colores extravagantes pero nadie me iba a decir nada así que, no importa.

Salí al pasillo y sonó el timbre. ¡Genial! Ahora sólo debía buscar a Junsu y al resto de mis amigos.

Caminaba tranquilamente hacia el comedor cuando choque con alguien. No, por favor.

-E-eunhyuk...-murmuró Sooyoung sonrojándose. Puse los ojos en blanco. ¿Realmente podías sonrojarte después de haber tenido sexo con alguien?

Decidí ignorarla -como siempre- y pasar de largo pero esta vez ella me sostuvo del brazo, deteniéndome.

-Espera...-las personas empezaban a aglomerarse a nuestro alrededor. ¡Mierda!

-¿Qué?-me giré para mirarla con fastidio y Sooyoung me extendió una carta.

-Por favor, leela -¿Una carta de amor? Bufé incrédulo. Debía estar bromeando. Hice lo que me pidió. Ella había escogido un mal momento y un mal lugar para pedirme eso pero ya que...

"Querido Eunhyuk..." empecé a leer en voz alta y su cara de vergüenza se deformó en una pánico.

"Desde el momento en que tú y yo nos volvimos uno solo no he podido borrarte de mi mente..."

-Detente...-susurró pero la ignoré y continué.

"Nunca hr conocido a alguien como tú, y tal vez te suene ridículo pero estoy enamorada de ti..." solté una pequeña risa y volví a mirarla. Estaba a punto de ponerse a llorar.

"Eres maravilloso y jamás me he sentido así. Eres especial y aunque quieras dar un aspecto de alguien indiferente y frío, sé que eres muy cálido..."

-Por favor, para -ahora las lágrimas ya caían libremente por sus mejillas. Qué tonta.

"Así que te pido una oportunidad para ser tu pareja y hacer que tu corazón se abra y..." no pude más. Empecé a reír a carcajadas y el círculo que se había formado a nuestro alrededor me acompañaban.

Sooyoung cayó de rodillas y se llevó ambas manos a su rostro. En otro momento no habría hecho eso, pero necesitaba desquitarse con alguien y ya lo había hecho. Decidí no terminar de leer su carta y la guarde en mi bolsillo. La miré por última vez desde mi posición y me volteé dispuesto a abandonar el lugar pero una voz me detuvo.

-¿Crees que porque hiciste eso te hará genial, maldito idiota? -me volví sobre mis talones y vi a una chica. No, era un chico. Tenía el uniforme respectivo a nosotros, pero su rostro, cabello y cuerpo eran como los de una chica. Fácilmente se haría pasar por una.

-Lo dice alguien que parece una chica -dije de regreso sin cambiar mi expresión de indiferencia.

-Eso sólo comprueba lo tonto que eres -se agachó y levantó a Sooyoung con tanta suavidad que por un momento hasta yo creí que ella iba a romperse -. Como no puedes responder a tus actos irresponsables la haces quedar mal en frente de todos.