Trois

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Hace très días que estoy encerada en mi cuarto. Desde que Justin me dijo eso, lo primero que hice fue subir a mi cuarto a encerrarme. Por suerte tengo mi propio baño y un mini refrigerador -no pregunten es una historia muy larga-. Me acuerdo lo último que me dijo.

"Muñeca, no te hagas la difícil sal por favor. Alice no te vas a poder quedar allí para siempre, vas a tener que salir y cuando lo hagas me vas rogar para que te bese y te toque como tanto te gusta."

Si fuera por mi, me quedaría en mi cuarto para siempre pero no tengo nada más de comer entonces tengo que salir lo más rápido posible a comprar y volver sin que Justin me vea.

Salí muy despacio por la puerta pero cuando me giro para cerrarla siento unas manos en mis caderas que me empujan hacia dentro de la habitación. De repente me undo en ese profundo color miel que rodea sus pupilas. Cada vez siento su respiración más cerca de la mía y veo que esos perfectos labios se acercan a los míos.

-¿Muñeca, por qué te me escondes? Yo solo quiero complacerte- y finalisando esas palabras unió sus labios con los míos, esos labios que extrañaba tanto, esos labios que con solo un roce te hacen sentir el paraíso-. Respondeme.

-¿Como quieres que te responda si no dejas de besarme?- se separo lentamente de mi, mientras mordía mi labio inferior- Justin tienes que dejar de hacer eso, yo ya no quiero nada contigo. Nos divertimos mucho en el pasado, pero me lastimaste y dejo de ser divertido. No soy muñeca y no me puedes manipular a tu antojo.

La mirada de Justin se puso borrosa como si fuera a llorar pero después se puso oscura, llena de rabia. Se sentó en mi cama, palmeo su regazo y me dijo.

-Ven muñeca, papi te debe un buen castigó.

***

Holita 😊 Justin le va a dar un buen castigo a Alice JEJEJE

¿Les gusta como va la historia?

Alice en multimédia.

Las quiero ❤

Daddy's Doll [j.b]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora