3

83 8 0
                                    

Sabia que si alguien mas, específicamente del genero masculino, te llamaba a mitad de la noche no se veía nada bien y menos si estabas con tu novio, pero eso no justifica que Matt no contestara mis llamadas ni mensajes sin darme la oportunidad de explicarle las cosas.

Solo me había contestado el ultimo mensaje que le mande con un: "Estoy ocupado, ve a ver que quiere ese tal jos". No iba a rogarle, no cuando quería arreglar las cosas y el tomaba esa actitud. Por mi podía seguir comportándose como un chiquillo de cinco años. Aparentemente regresábamos a las absurdas peleas.

Mañana volvería a la rutina de la semana en la cafetería y necesitaba pensar que era lo que iba a hacer con Jos. Ni si quiera lo conocía y ya me causaba dolores de cabeza, quizá debía cambiar mi numero o buscar alguna otra solución rápido.

Ellie no tardaba en venir para ir a comer juntas y yo seguía en mis fachas mañaneras. Aprovecharía a contarle toda la situación para recibir un consejo o al menos decirle a alguien antes de que mi frustración acabara conmigo.

Después de un ducha refrescante y un cambio de ropa a la velocidad de "Tu tienda favorita esta a mitad de precio, ¡corre!", estaba lista y a tiempo para contestarle a Ellie y decirle que enseguida bajaba.

Fuimos a un restaurante chino con la forma tradicional de las casas chinas con lamparas como globos colgando del techo. Entramos y pedimos en seguida, el lugar estaba lleno y seguramente la comida tardaría en llegar.

-¡Cariño, hace una semana que no te veo! -Protesto mi amiga frente a mi con los brazos en jarras.

-Lo siento -Suspire.- He tenido demasiado trabajo en la cafetería que no he tenido tiempo ni de respirar pero no me quejo.

-¿Que no hay mas empleados? -pregunto frunciendo el ceño.

Ellie era una persona con la que podías pasártela bien pero aun con un metro cincuenta y seis, también tenia fama de enojona y feminista con una pizca de sarcasmo. Era como un pequeño chihuahua que hacia honor a la frase chiquito pero picoso, a pesar de tener un aspecto inofensivo, solo intenta hacerle o decirle algo malo; sacara sus garras, te enseñara sus dientes y te mostrara esa lengua filosa que tiene.

pero era un verdadero encanto con todo y eso. Era de las pocas amigas que tenia y que me apoyo durante la muerte de mi abuela.

-Bueno... el padre de Darla ha enfermado por lo que tuvo que recortar personal. Ahora solo somos Anna, Joey y yo -anuncie sintiendo pena por lo que pasaba con el padre de mi jefa.- Aunque "si sabes contar, no cuentes conmigo" se ha convertido en el lema de Anna este mes, agradezco haber podido conservar mi empleo.

-Si alguna vez te da problemas esa chica solo dímelo y tendré una charla con ella a gusto.

Su mirada y su sonrisa maliciosa me dejaron en claro que en verdad lo haría, sacudí las manos frente a mi mientras le decía que no seria necesario.

-También te quería contar algo -Le di un sorbo a mi bebida.

-¿Alguien a quien tenga que romperle la cara? -cuestiono arqueando los ojos.

-Tranquilízate, fiera- La reprendi, aveces parecía como una madre felina cuidando de su pobre cachorro, en este caso yo, de cualquier depredador.- Hace unos dos o tres días recibí una llamada...

-¿De esas como en las películas de suspenso?- pregunto con los ojos abiertos de par en par. 

-¡No!  ¡Ellie, Concentrate!

-Lo siento, lo siento. Prosigue... - Indico con la cara seria que ni ella se la creía.

-Como te dije... Hace como dos o tres días recibí una llamada en la madrugada. Era un chico que se llama Jos que no conozco y para colmo borracho. No se porque tiene mi número, eh pensado seriamente que una chica le dio un número falso que resulto ser el mio para quitárselo de encima. La verdad no se, pero el caso es que trate de decirle que se equivoco de persona, pende que había entendido porque no llamo en viernes pero ayer volvió a llamar justo cuando estaba con Matt- relate haciendo una mueca.

Me pidió que le dijera las conversaciones con lujo de detalle. Cuando termine me miro antes de echarse a reír.

-¡Oh, Cariño! ¡Que inicio tan cómico y original para una historia de amor!- Unió sus manos riéndose.

-¿Como que historia de amor?- Pregunte extrañada.

-Cualquiera es mejor que ese menudo idiota- dijo arrugando la nariz de desagrado.

Se que se refería a Matt, como siempre lo hacia.

-Como sea, creo que lo mejor sera cambiar de numero.

Sin embargo, No podría hacerlo inmediatamente porque la compañía telefónica no trabaja los fines de semana hasta mañana lunes, pero por el trabajo no sabia hasta cuando podría, la comida llego tiempo después, dando por terminada nuestra platica de Jos, en cambio nos enfrascamos en una ligera conversación acerca de su trabajo en una reconocida firma de abogados.

|La Luz De Mi Vida| Jos canela & TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora