Capitulo 35. Te protegeré.

Comenzar desde el principio
                                    

― Ahora que me acuerdo, ¿vosotros no estabais en una cita? ―dijo Dan, Jose abrió los ojos de forma desmesurada momento que aprovechó Matt para darle un puñetazo en el estómago y hacerlo caer de rodillas debido al dolor.

―¡Matt!―exclamó Nora con sorpresa, Jose se quedó en el suelo unos instantes intentando recuperar el aliento aunque si levantó la mirada para lanzarle rayos al rubio.

―Y luego la bruta soy yo.―comentó Sonia agachándose para ayudar a Jose a incorporarse. ―¿Estás bien?

― Si, si... estoy bien.―contestó Jose tomando grandes bocanadas de aire y con la mano aún sobre la barriga, miró hacia Matt con odio.―¡¿Qué demonios pasa contigo?!

―Eso por quitarle el móvil cuando estaba hablando conmigo y luego cortar todas las llamadas.―explicó Matt con soberbia cruzándose de brazos, Jose entrecerró los ojos y deseó que le cayese un rayo al rubio así se libraba de él y nadie podría echarle la culpa por su muerte.―Además, no voy a tolerar que el niño que la atormentó siendo niños se junte con ella, por tu culpa es claustrofóbica, y cuando estás cerca le recuerdas todo lo que pasó pero ella es demasiado buena para decirtelo directamente.

¡Eso era un golpe bajo! el castaño apretó los puños y miró hacia Nora, la morena que lo observaba fijamente apartó la mirada de él y se centró en Matt al que se acercó hasta colocarse a su lado. Jose la miró con miedo, no le gustaba que le recordarán eso, cada vez que mencionaban el tema la mirada de Nora se ensombrecía y parecía que lo odiaba.

―Deberíamos volver, estamos en una zona controlada por Quevedo.―indicó la morena, Matt asintió y se dio la vuelta no sin antes lanzarle una última mirada amenazante a Jose, tras eso el rubio caminó hacia la boca de metro más cercana seguido de Dan y Sonia que iban tomados de la mano.―Mi móvil.

Jose miró a Nora y vio como ella tenía la mano extendida, Jose la miró un par de segundos dudando de si sería una buena idea tomarla de la mano y arrastrarla lejos de allí, al final decidió que era una idea estúpida y metió la mano en el bolsillo de dónde sacó un móvil táctil de color blanco que depositó sobre la mano de la morena lentamente. Una vez que se lo entregó, ella se dio la vuelta dispuesta a marcharse de allí.

                                                                       * * * *

 ―Buenos días.―saludó a Cris entrando en la clase, su amigo hizo un ligero movimiento de cabeza y Jose se desplomó sobre su silla.

Se había pasado todo el puñetero fin de semana pensando que podría pensar la morena, y su conclusión fue una auténtica porquería. Si él fuese Nora, no lo perdonaría jamás...¿cómo perdonas a una persona que te traumatizó para el resto de tu vida? Si, vale... en lo que llevaban de curso la había rescatado en innumerables ocasiones y había demostrado que él no era ese horrible niño pero eso no significaba que ella lo perdonase o quisiera ser algo más que amigos. 

―¿Cómo que Will besa mejor que yo?―preguntó Dan entrando en la clase con Sonia a su lado asintiendo, la pelirroja tal y como era de esperar vestía uno de sus habituales chándales.―¡Esto es indignante!

―Pero es normal, él tiene más experiencia, no te puedes comparar.―habló Sonia mientras a Dan se le deformaba la cara en una horrible mueca.

―¿¡La estáis escuchando!?―exclamó Dan mirando hacia la puerta por dónde se asomaron Nora y Matt y asintieron.

― Llevamos todo el camino escuchando vuestra discusión.―comentó Matt empujando a Nora que iba leyendo el libro que el sábado sacó de la biblioteca.

―¡Pero es que es increíble! ¡Que Will besa mejor que yo, no sabes de lo que hablas tabla de planchar!―exclamó Dan señalando a Sonia y agitando la mano, la pelirroja cerró el puño derecho y lo chocó contra la palma de su mano izquierda.

Tienes que ser tú (TQST Libro #1)© [EN LIBRERIAS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora