Única Parte

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Cause if I want you, and I want you, babe

Ain't going backwards, won't ask for space

Cause space is just a word made up by someone who's afraid to get too...

– Nick Jonas.

[🌸]

Viernes al anochecer y nuevamente se encontraba allí, viéndolo bailar, como cada una de las noches de los fines de  semana.

Las melodías del lugar resonaban por sus oídos mientras que por sus fosas nasales percibía el claro olor a alcohol y el de las hormonas que los adolescentes desprendían en aquel establecimiento.

De igual modo, los chicos y las chicas que por frente de él pasaran en ese instante no le podrían de importar menos que nada.

SeHun tiene su vista totalmente centrada en la pista de baile, aunque más que nada sobre una única persona, y se lo podía apreciar claramente feliz.

Como siempre él estaba allí tan radiante entre muchos otros, haciendo que únicamente pudiera fijarse en sí y en nadie más: un pequeño castaño de clara contextura delgada se movía de una manera que le incitaba a apreciarle en su totalidad.

Se sentía bien con el solo hecho de observar aquellos agraciados pasos de baile desde la lejanía, disfrutando de cada una de sus expresiones faciales tras de cada movimiento.

Y es que, se veía tan malditamente bien con aquel vestuario oscuro, tan distinto a como siempre solía ir, sus expresiones le sumaban muchos puntos extras.

Los suspiros de varios por aquel joven eran difíciles de aceptar, pero lo hacía, pues sabía cómo terminaría la noche.

Una vez la pieza que resonaba en el bar se dio por terminada, el espectáculo que aquel castaño también. Rápidamente se abrió paso hasta la barra de tragos en dónde SeHun yacía bebiendo y desde donde, hacía unos pocos segundos, le había estado admirando.

– ¿Acostumbras a seguirme siempre, mi pequeño Oh? ­

Fue lo primero que salió de los labios del castaño, en una voz algo alta pero a su vez calma para que el menor de los dos pudiese escucharlo por sobre la música, mientras él lo observaba con una sonrisa simplemente encantadora para el rubio.

SeHun soltó una suave carcajada aun sin despegar su vista de aquel muchacho. Negó un par de  veces con su rostro, comenzando una amena conversación con su mayor.

De vez en cuando, sus ojos pasaban de estar en su bebida para ir a parar en la figura de LuHan. Su cabeza comenzaba a sentir el pesar causado por el trago que había estado consumiendo desde hacía un rato y de a poco se llenaba de miles de pensamientos relacionados con su mayor.

El hilo de la conversación se fue convirtiendo, con el pasar de las horas, en palabras inconclusas y confusas para cualquiera que las llegase a escuchar.

El habla era nulo al cabo de un rato y también poco necesario para aquel par. El sentimiento de alegría que ellos poseían no abandonaría sus cuerpos hasta el día siguiente causa misma de la ingesta de alcohol y del mismo momento en sí. 

Los corazones tomaron el control de las acciones, abriéndose paso con una simple invitación a bailar. Los roces tímidos, únicamente notables para aquellos conocidos de tanto tiempo que ahora estaban dentro de su propia burbuja tan cerca el uno del otro y sin espacio que los separase, los conducían a movimientos más confíados y seguros con el paso de los minutos.

Las horas se les hacían cortas pero la intención de alejarse el uno del otro no parecía aparecer en aquel encuentro.

Con el paso del tiempo, ambos abandonaron aquel establecimiento repleto de jóvenes hormonales caminando en un estado un poco más sobrio del que habían adoptado al simplemente comenzar de hablar.

Fuera, el clima era frío pues estaban en invierno, lo cual les iba permitiendo la cercanía de sus cuerpos al avanzar por la zona central del distrito de Gangnam.

Bajo las luces de los edificios del lugar, ambos seguían caminando con tranquilidad, sin necesidad de conversación de por medio.

LuHan iba totalmente centrado en la figura de su pequeño.

Estaba más que seguro que aquel rubio era su perdición. El quererlo sería un problema en muchos aspectos de su vida y él ya lo hacía, claro que sí. Pero, no se arrepentiría jamás de ello.

Porque a pesar de que SeHun fuera la persona menos expresiva que en su vida haya conocido, sabía que cuando se lo proponía podría sorprenderlo de la mejor forma.

LuHan con cada beso ya se sentía caer rendido a sus pies. El sentimiento de miedo no estaba presente en su persona al tenerlo a su lado y su calma se abría paso al verlo sonreír.

Tenerlo allí lo hacía sentir completo y quería permanecer cerca siempre, porque espacio es una palabra creada para las personas que tienen miedo de justamente estar a poca distancia de lo que saben que es su perdición.

Por mientras tanto, SeHun no quedaba atrás en cuanto a pensamientos en relación a su mayor. Sus labios mantenían una pequeña curvatura la cual a simple vista pasaba desapercibida, pero que sabía que el castaño ya había notado.

Desde hacía varias cuadras que el de mayor de estatura había atraído al menor a su lado por medio de un abrazo, y seguía su rumbo con total normalidad.

Tras varios minutos de largo trayecto, las calles se terminaron y por fin se encontraban en su destino.

LuHan abrió la puerta de su hogar, permitiendo así el ingreso al departamento en el que actualmente residía. Entró seguido de su pareja quien al tan solo cruzar por la puerta principal lo tomó en un abrazo por su espalda, depositando alguno que otro beso por sobre la piel expuesta del cuello del castaño.

Había pasado tanto tiempo desde una cercanía tan grande entre ellos y es que los tediosos días de clases los tenían acorde a un horario que a duras penas le permitían media hora de su tiempo para sí mismos.

Pero, hacía dos días que estaban libres y al fin los podrían disfrutar a su modo.

Comenzaron con besos tímidos, acompañado de alguno que otro roce entre ambos y el espacio volvió a ser transparente.

Las palabras dulces de parte del mayor hacia su pequeño salían en forma de susurros, mientras que las caricias del menor incitaban a acciones más fogosas entre sus cuerpos.

Desde ese momento la razón ya no tuvo el control total sobre sus cuerpos. Los pequeños roces se descontrolaron y todo en aquel lugar estalló en lo que es tan espectacular para ellos: la unión de sus cuerpos en uno solo.

La habitación era testigo de la cercanía que aquellos jóvenes poseían.

Ellos no retrocederían. No pedirían espacio, pues ellos no tienen miedo a estar demasiado cerca.

[🌸]  

¡Hola! 

Les traigo hoy algo que se me ocurrió de la nada al escuchar la canción "Close" de Nick Jonas en colaboración con Tove Lo.

No les aseguro que sea uno de mis mejores trabajos, pero me ha complacido el como ha quedado. Aunque en un principio pensaba en hacerla con el SuLay o SeHo.

Sin más que decir, les agradezco por tomarse el tiempo de leer otra de mis raros One Shots.  

Close ↬ HunHan ↫Where stories live. Discover now