Carta de un soldado

EPILOGO

+++ELENA+++

*Tres horas mas tarde de la despedida del tren*

Después de despedirme de Dayan en el tren, fui al mercado a comprar comida sana, es decir la que necesitaba comer para beneficiar la salud de mi bebe, llegue a mi casa y coloque toda la comida

No paraba de pensar en Dayan, creía y creo en su promesa al cien por cien, pero sigo temiendo por su vida obviamente, ahora me arrepiento un poco de no haberle dicho que espero un hijo suyo

Solo espero que cuando regrese de la guerra, no se enfade conmigo por no habérselo dicho antes, aunque si se enfadara seria con razón, pero seguro de que Dayan se alegrara

Comí en silencio, todo era demasiado tranquilo, todo era como antes de conocer a Dayan, me faltaba sus sonrisa, su risa, su forma de ser en general, se acababa de ir y yo ya estaba llorando como una boba por su partida, serán las hormonas supuse

Recogí todo lo de la comida y me senté a leer en el sofá, aunque poco a poco me fui quedando dormida, y como si me dormía ahora no dormiría en toda la noche decidí salir a dar un paseo por el pueblo

Empecé a  caminar sin ningún rumbo, y acabé visitando todos los lugares donde estuve con Dayan, el prado al lado de mi casa, la fuente, la playa, el lugar del baile, el hotel donde estaba, todo, todo en este maldito pueblo me recordaba a el y supongo que es de momento, junto a las fotos, lo único que tengo de el

Y no solo de él, si no también de Enrique, Tyler y Louis, esos chicos era de lo que no había serian capaces de colgarse de un árbol para hacer reir a una chica, aunque claro siempre estaba papa Enrique, como ellos le llamaban, para ponerles unos limites, y es que no dejaban de ser unos críos de 20 años

Caminando, caminando llegue al cementerio donde estaban mis padres, cogí unas flores y las deje en sus respectivas tumbas, me senté en el suelo y les comencé a hablar, necesitaba hacer esto cuanto antes

-Hola, papis, si se que hace mucho tiempo que no vengo, pero es que me han pasado tantas cosas- dije mientras las lagrimas empezaban a salir por mis ojos- conocí a un chico, si mami, al final si se que este es el indicado, es un soldado, se que un amor con un soldado es difícil, pero el es diferente a los demás, si papa le conociera le encantaría incluso se irían a cazar al bosque como dos buenos amigos- dije mientras una sonrisa amarga se posaba en mi cara- es perfecto, se llama Dayan, y es romántico, cariñoso, atento, se jugó la vida en contra de su padre por defenderme, ahora no está porque se está librando la última batalla-dije mientras mis lagrimas eran incontrolables ya- pero él me jura siempre que va a volver, y además es que tiene que volver si o si, porque yo estoy embarazada, si, espero un hijo de Dayan, y aunque es posible de que no vuelva, estoy contenta, porque tengo una parte suya y prueba de nuestro amor dentro mío, me gustaría tanto que estuvierais aquí conmigo y vierais a vuestro nieto crecer, quien lo diría eh, vosotros abuelos, y sin embargo no estáis aquí aunque se que estéis donde estéis me protegéis.

Estuve mas de una hora hablando con mis padres, en realidad necesitaba esto, necesitaba desahogarme, me dirigí a casa cuando ya empezaba a anochecer, llegue a mi casa, me prepare una cena liguera, tampoco quería cenar mucho pues si no, no dormiría nada en toda la noche