Capitulo 11.

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Los días pasaron tan rápido que Oriana dejo de contarlos, hasta que llegaron a meses y su parto se acercaba, estaba mucho mas llenita, Julian siempre la veía con ojos de ternura y le robaba miles de besos.

La vida allí había dejado de ser un sueño para ella, llevaba ya tiempo y se había acostumbrado, amaba a su hijo y realmente podía decir lo mismo refiriéndose a Julian, claro que de otra manera mucho más apasionante.

Era domingo y como semanas atrás habían planeado Julian, Javier, el bebe en camino y Oriana iban de camino a la casa de Diana para una cena familiar.

Al llegar allí supieron que eran los últimos pero tenían la excusa de que a la joven le empezaba a costar caminar con tanto peso.

Fue una cena movida, charlas, anécdotas, muchos saludos ya que Yolanda y su esposo estaban mucho de viaje y poco se les veía, y al fin y al cabo las cenas, almuerzos, desayunos o cualquier otra comida en familia era importante y necesaria ya que a todos les hacía sentir unidos a pesar de la distancia.

-Yo digo que lo tendrá esta semana-

-Yo dentro de dos semanas-Decían uno y otro discutiendo la fecha de el parto de la joven, lástima que ninguno acertó, pues mientras todos reían y seguían hablando ella comenzaba a sentir un dolor insoportable bajo el vientre y luego...las piernas empapadas, primero se asusto, luego la vista se le nublo y dejo de pensar, se agarro con fuerza el vientre queriendo que aquella sensación desapareciera pero cada vez era peor, entonces Julian que extrañaba la voz de su mujer perfecta la miro y vio como está completamente llena de sudor y sus ojos cerrados y su labios fruncidos demostraban su fuerza.

-¿Qué te pasa amor?-Dijo asustado y girándose hacia ella, Oriana se sintió aliviada cuando todos dejaron de hablar hasta que se acercaron a ella asfixiándola sin tocarla, Julian miro su entre pierna y sin esperar respuesta la subió en brazos.

-Dame las llaves de tu coche rápido-Grito él a Negro que estaba paralizado y este después reaccionar metió su mano en el bolsillo y se las tiro.

-Te vemos en el hospital hijo ten cuidado-Dijo Diana algo angustiada-

Julian salió lo más rápido que pudo con ella en brazos respirando agitadamente con pausas en las que el aire le era escaso, su cuerpo ya estaba completamente empapado.

-¡Me duele!-Grito desesperada.

-Ya lo sé mi amor-Dijo Julian tratando de tranquilizarla pero decirle eso empero todo-

-¡No, no tu no lo sabes yo soy la que estoy embarazada no tu idiota!-Grito frustrada hundiendo la cara en el pecho de Julian-

-Tranquila ya va a pasar cielo-Julian trataba de sonar lo más tranquilo posible aunque por dentro estaba incluso más nervioso que ella-

-No es verdad, me voy a morir mierda!-Dijo mientras el abrochaba su cinturón y cerraba la puerta, corrió y se metió por el otro lado arrancado rápidamente con una mano sobre la que ella tenía en su vientre

-Respira, no vas a morir pequeña-

-Se me agota el oxigeno-Ella cada vez se sofocaba mas-

-Respira despacio amor-El intentaba inhalar y exhalar mostrándole a Oriana como- vamos inténtalo

-No puedo-Dijo comenzando a llorar, el cabello comenzaba a pegársele a la cara con el sudor-¡Aaa!-Se quejo una y otra vez echando la cabeza para atrás.

-Mierda! lo que faltaba-Dijo dando un golpe en el volante.

Oriana bajo la mirada y se percato de el puente totalmente colapsado el transito era un caos.

Shh, cuidado con lo que deseas. (Adaptada)Where stories live. Discover now