Rachel, Tony & Terry

Rachel

Ella muerde sus labios. —Bianca.

Él asiente. —Bueno, háblame de ti. ¿Qué te gusta hacer?

Ella frunce sus labios. —Em, creo que me gusta... ver televisión con mis padres.

El hombre cuarentón responde con un "Aww" —Eso es genial, Bianca.

Ruedo los ojos.

Luego señala a otro chico. — ¿Cómo te llamas?

Aclara su garganta. —Eh, me llamo Robert, señor.

El hombre ríe falsamente. —No me llames, señor, Rob. —Sonríe—. Soy Charlie para todos ustedes.

Charlie.

Sigue hablando con varios chicos hasta que le toca hablar a Tony. Charlie le pregunta: — ¿Cuál es tu nombre, amigo?

Tony suspira y responde sin levantar la vista. —Tony.

Yo lo observo mientras responde las preguntas. — ¿Y qué es lo que te gusta hacer?

Esto es tan aburrido. Pensé que iba a decir que le gusta leer pero, en su lugar, termina confesando: —Pasar tiempo con mi perro.

Luego, es mi turno. No puedo creer que realmente esté aquí. Sé que estos chicos lo necesitan pero yo no tengo problemas para socializar, en realidad, mi problema es que hablo de más.

— ¿Cómo te llamas amiga?

¿No es obvio? Todos tenemos etiquetas en pegadas en nuestras camisas. —Terry. —Contesto.

Tony levanta la ceja y me mira.

Charlie frunce el ceño. —Pensé que te llamabas Rachel.

Me encojo de hombros. —Digamos que me gusta que me llamen Terry.

Charlie lo toma como respuesta. Ahora pregunta: — ¿Qué te gusta hacer?

Sonrío. —Me gusta planear formas crueles en las que puedo llegar a torturar a mis compañeros, también me gusta dibujar mutantes.

Charlie no sonríe. —Rachel, sé honesta.

Ruedo los ojos. —Me gusta... — ¿Qué me gusta? —. Me gusta pasar tiempo con mis amigos, bueno, con mi amigo.

Tony sonríe desde mi vista periférica.

— ¿Así que tienes un amigo? —Oh Dios, ¿Enserio se sorprende que uno de nosotros tiene un amigo?

Asiento. —Sí, es bueno conmigo. Normalmente me susurra cosas horribles, pero ya sabe, eso es lo que los amigos imaginarios siempre hacen.

Charlie rueda los ojos.

***

Finalmente toda esa cosa había terminado. Teníamos un descanso antes de la última ronda de socialización. Tony está cerca de las magdalenas y me acerco a él con mi plato purpura de plástico. —Hola, soy Rachel, ¿Quieres ser mi amigo?

Tony sonríe. —No, creo que no.

Le doy un codazo. — ¿No saben que nos conocemos?

Niega mientras toma una magdalena de chocolate.

—Hey, toma una para después, llévatelas todas mejor.

Tony ríe cuando una chica se nos acerca. Es la misma pelirroja. —Hola. —Murmura muy tímida.

Tony se queda serio de nuevo. —Hola. —Digo yo solo para no ser tan mala.

Ella no me mira sin embargo, le da miradas a Tony. —Eh, fue lindo lo que dijiste de tu perro.

Tony me da una mirada pero me encojo de hombros. Ella ríe. —Soy Bianca, por cierto.

Tony aclara su garganta. —Un placer.

Sonríe. Esta chica no es tan tímida como los demás. — ¿Te veré la próxima semana?

Hey, me siento ofendida. Básicamente le está preguntando si volverá y a mí no.

Tony se encoje de hombros.

Ella suspira. —Bien, fue un placer. Todos somos amigos aquí, ¿No? —Ese es el lema de esta cosa—. Me gustaría ser tu amiga.

Bianca se aleja y yo sonrío. —Vaya, Tony eres todo un rompecorazones a donde sea que vayas.

—Sí, bueno... en la escuela no resultó tan bien.

Bufo. —Danielle es una tonta. —Señalo a la pelirroja que por algún motivo, me desagrada—. Quizás esta es la buena.

Tony niega con los ojos en blanco.

—Solo prométeme que en su boda, yo seré la dama de honor con el vestido bonito.

Tony toma una magdalena y la mete en mi boca.

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Feliz lunes, ¿Como les va? Nos vemos el viernes con otro capítulo... :D