Hey Angel ( Niall Horan )

CAPITULO 1

Y allí me encontraba en la rutina de siempre, sentada en mi puesto en la escuela, con la mirada fija en mi cuaderno mientras hacia un graffiti o algo así, el profesor explicaba un tema el cual me lo sabia perfectamente, no es por sonar presumida pero había leído los suficiente de la guía que nos habían entregado hace unas semanas.
Mis sentidos se activaron en el instante en el que un papel cayó sobre mi cuaderno, miré hacia el lado derecho de donde provenia.... Era Melissa.
Aquella que me hacia la vida imposible; la que me la hacia cuadritos.
Me rehúse a abrir el papel pero el chico que estaba atrás de mi, me obligó a mirar una vez mas a la evola..Pude notar que ella me mostró un puño, sabia perfectamente que significaba eso....
Hoy no quería que me hicieran nada no estaba en los mejores ánimos del mundo. Así que decidí abrir el embolado papel..

"Que tal estas hoy putita?? Te gusto tu merecido de ayer??"

La miré, estaba sonriendo la muy estúpida....

-Pudrete - dije en un susurro audible solo para mi. La miré de reojo, tenia una mirada matadora.

"NO PUEDE SER! TE ESCUCHÓ ROSELINE TE ESCUCHÓ!"

Sé lo que vendrá ahora en el descanso. La evitare... si eso! O me escondo en los baños como la cobarde que soy, así me ahorro una humillación como la de ayer. Eso sera exactamente lo que haría o era lo más fiable en el momento. Siempre me he odiado a mi misma por ser tan cobarde y sentimental. A veces me siento como el ser mas débil de esta vida o simplemente como una bolita de miedos que no es capaz de desenvolverse.
Una voz me sacó de mis cavilaciones.

- ¿Se encuentra bien señorita Martins?- preguntó desde su escritorio el profesor de Química Sacudí un poco la cabeza solo para darle un torpe asentimiento.

Sonó la torturosa campana. Es el descanso. ¡ES EL DESCANSO!
Me levante rápido de mi asiento, saliendo de inmediato del aula. Tenia demasiada hambre así que decidí ir a la cafetería por algo para comer. Compre una hamburguesa con papas y un refresco extragrande. Iba directo al baño mientras comía con angustia.

"CARAJO! DEVUELVETE DE UNA BUENA VEZ!!!" me dijo mi subconsciente.

Melissa iba saliendo del baño con su combo de zorras igual que ella. Inmediatamente reaccioné y me devolví.
Caminé hacia otro pasillo que daba al campus del colegio.
Camine lo mas rápido posible mientras veía como algunos chicos y chicas me miraban raro por lo apresurada que iba. Encontré un árbol grande que estaba bastante apartado de las mesas de la cafetería y me senté detrás de este. Recosté mi cabeza en él suspirando cantidad de veces intentando apaciguar el ataque de pánico que me invadía. Bebí otro sorbo de jugo y respiré profundo una vez más sintiendo mis músculos relajarse por completo. Por primera vez desde hace tres días que sentía tranquilidad; paz.
Comí sola como casi siempre lo hago, ahora mismo lo estaría haciendo con la chica que amo con toda mi alma; Marylise, mi mejor amiga. Pero por el problema con las clones no podré por hoy. Mínimo me esta buscando como una loca. Sonreí ante ese divertido pensamiento de ella buscándome como una loca.
Ella siempre ha estado ahí para mi.. siempre ha estado opuesta en lo que me hacen las clones siempre dice " Solo dejame saludarlas.." sabiendo a que se refiere; Le encanta el bardo en ese caso somos opuestas. Pero aun así le debo la vida, de no haber sido por ella, ya estaría muerta; gracias a que un grupo de chicas en sexto grado me golpearon detrás de la escuela por haber presentado un proyecto al cuál ellas iban conmigo pero nunca se presentaron. Ese fué el día que la conocí o bueno, ella me conoció; ya que salió a fumar un cigarro prácticamenteb yo estaba inconsciente, sangrando por una herida en la cabeza causada por una hija de puta, que nunca más volví a ver.
Me levanté de aquel pasto y limpie la falda de mi uniforme ya que se ensució de un poco de tierra. Fuí directo al baño a lavarme las manos. Estaba frente al espejo lavandome un poco la cara. Y el reflejo que ví, me puso la piel de gallina, mi respiración se atasco en mi garganta y mi sangre se fue a mis pies. Sentí que el aire me faltaba... y me faltaría, porque lo que ahora se vendría era un caos.