Conociendo al Mundo (CAM#1)

Simplemente inaceptable

Estaba tan tranquilo en mi habitación cuando la voz de mi madre irrumpió en el salón junto con otra voz masculina que supongo pertenecería a Cristian, mi mánager.
-Byron Rose Cooper, ¡baja aquí ahora mismo!- dijo, corrijo, gritó mi madre. Ella y su molesta manía de hacer partícipe a los vecinos de nuestros asuntos.
En efecto lindas, habéis leído muy bien, no os falla la vista, soy Byron Cooper, el artista más famoso y extraordinario que ha tenido el placer de ver este planeta. Por favor, no os pongáis a gritar ni a llorar ahora, no lo aguanto, es sumamente inaguantable los agudos sonidos que salen de vuestras cuerdas vocales. Pero, volviendo a lo importante, es decir, a mi, prosigamos con mi vida.
Bajé cabizbajo, pues eso siempre funcionaba cuando hacía algo mal. Tener una madre bastante afable tenía grandes ventajas que sabía bien cómo utilizar a mi beneficio.
-¿Sí mama?- murmuré con voz angelical.
-¿A caso no lo sabes, EH?- empalidecí cuando sacó una lista de su bolso que anunciaba lo peor y empezó a recitar mi número de malas acciones de esta semana- robo a una chica en un bar, conducción por la autopista a 200 km por hora y lo mas interesante, ¡bajo la acción de drogas!- hizo una bola la lista y me la tiró a la cara- ¿tú estás tonto o qué te pasa hijo? ¡Esto es simplemente inaceptable!- si algo conseguía hacer florecer a la bestia interior de mi madre, esa era la mención de drogas o alcohol. Mi madre odiaba esas palabras, tal vez porque fueron las causantes de que mi padre nos abandonara y se convirtiera en un monstruo.
Tomé de nuevo mi posición desenfadada y me apoyé en la pared, mientras esperaba con diversión el recital de siempre sobre la ingesta de estos productos por parte de la señora Cooper.
La interrupción de Cristian vio frustrados mis planes- Byron, ¿tú sabes lo que ensucia todo esto a tu imagen? Y mejor que todo eso, ¡te ensucia a tu persona!
Me crucé de brazos y respondí- lo tengo controlado ¿vale?- él no tenía ningún derecho a reclamarle nada. Era simplemente una persona que se encargaba de llevar mi vida profesional a cambio de un buen pago.
Vi como mi madre se echaba las manos a la cara y giraba sobre sí misma, claramente desesperada por mi actitud, según ella, rebelde e inmadura. Llevábamos ya varios años de continuas charlas, no creo que eso fuese una simple actitud, pero ella no parecía querer comprenderlo.
-No hijo, no lo tienes controlado, desde que te dejó aquella chica no has levantado cabeza- dijo mi madre, ella todavía se creía que había cambiado por ella, ¡qué equivocada! Esa colegiala solo había sido una más en mi lista y la que me había llevado a la cúspide de mi libertad. Era Byron Cooper, tenía derecho a hacer lo que quisiera.
-Creo que te vendría un descanso de tanta fama, ir a un lugar donde nadie te conociera- expuso Cristian, mi madre asintió dándole la razón.
Hice un suspiro de suficiencia- ¿un sitio donde nadie me conozca? Imposible, a ver, estamos hablando de mí.
-Oh, no, tranquilo majestad. Nada es imposible. Déjame hacer una llamada, y haz tus maletas. Te vas de viaje- afirmó, haciéndome entender que esto ya estaba hablado desde que empezamos esta discusión.
Miré a mi madre demandando explicaciones pero ella solo asintió pesarosa- un viaje de desintoxicación de la fama será lo mejor Byron, ve a hacer tus maletas, si todo sale bien, saldrás mañana por la mañana- después de ese surrealista anuncio, se va por la misma puerta por la que se ha ido Cristian.
Una simple, joven y nueva camarera se cruza en mi camino a la habitación, la cojo de la cintura y la meto a mi cuarto sin mucho esfuerzo. Nadie se puede negar a mis encantos.
La maleta puede esperar mamá, me jacto de mis pensamientos mientras la chica se va acercando a la cama. ¡A disfrutar el momento se ha dicho!

Capítulo editado

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Espero les guste, con mucho amor😘,

PIMPAMPUM3