C h a p t e r F i v e

Start from the beginning
                                    

»Fin del Flashback«

Siguió caminando hasta que se alejó demasiado de ellos, Miro hacia arriba, faltaban unas dos horas para que se hiciera de día.

— Pensaba que iba a cambiar.. —Susurró mientras que dejó de caminar, y se sentaba en el suelo secando sus lagrimas.

Los dos chicos, Sting y Rogue salieron corriendo tras ella.

— ¡Fue tu maldita culpa! —Gritó Rogue, mientras trataba de correr.

Sting no dijo nada, solo lo cargo en sus brazos y corrió lo más rápido que pudo aun tras Yukino.

— ¡Yukino! —Gritaba Sting mientras corría por la dirección en la que Yukino se había ido.

Rogue estaba muy confundido.. Sting lo quería.. ¿En una forma pervertida o amorosa? Ah.

Desde lo lejos, vieron a Yukino sentada mientras seguía llorando.
Los dos chico se acercaron, Sting dejó en el suelo a Rogue.

— ¿Por qué lloras? —Pregunto Sting mientras se acercaba a Yukino para abrazarla.

Yukino no se opuso, se dejó abrazar por el rubio mientras paraba de llorar.
No sabía por qué no se enojaba.. Tenía el corazón muy.. Por así decir.. ¿Noble?

— ¿Nos perdonas? Prometemos no hacerlo de nuevo. —Dijeron al unísono Sting y Rogue.

— E-está bien.. —Dijo mientras sonreía, Sting la abrazo más fuerte. Y Rogue se acercaba a abrazarla.

— Te queremos, Yukino. —Dijeron al unísono, de nuevo.

— Y yo a ustedes, tontos. —Rió, no era por qué tuviera el corazón noble.. Bueno, aparte, no podía estar enojada con personas que la hacían reír y sonreír.

— Pronto se hará de día, debemos de buscar el camino para regresar al gremio, aunque nos cansemos, tenemos que regresar hoy.. —Dijo Rogue, separándose del abrazo.

Sting le tendió la mano a Yukino para que esta se parara.
Yukino tomó su mano, y se paró soltando la mano de Sting.

Sting volvió a cargar a Rogue en su espalda. Y le dio la mano a Yukino mientras el rubio empezaba a correr muy rápido.

— ¡Tenemos que regresar a Sabertooth! —Grito, mientras Yukino seguía el paso de Sting.. Y Rogue, bueno, él muy chingón en la espalda de Sting.

Ambos siguieron corriendo. Yukino tenía la respiración agitada a más no poder. Sting, bueno.. Sting era muy raro, y por una extraña razón no se cansaba.

¡Eso no tenía fin! Llevaban como nueve minutos corriendo y no veían nada.

Todos habían perdido las esperanzas de regresar, hasta que vieron un gremio a lo lejos..

— ¡Miren, chicos! —Grito Yukino, mientras las fuerzas regresaban al ver a su amado "gremio".

— Llegamos al gremio de S.. ¿Fairy Tail? ¿Dónde carajos nos habíamos metido para salir acá? — Sting le salió una gotita en la cabeza,

— ¡Este... Este no es nuestro gremio! —Lloriqueo Yukino, mientras respiraba un poco agitada.

Sting abrió la puerta de una patada, Erza rápidamente saco una katana.

— ¡Natsu! —Gritó Sting mientras tiraba al suelo a Rogue y se metía rápidamente al gremio para buscar al antes nombrado.

— Ya valiste.. —Susurró Gray hacia Natsu.

Natsu prendió su puño en fuego mientras se dirigía a Sting.

— ¡Eres un maldito! ¡Nos hiciste una maldita petición falsa! –Grito Sting, todos quedaron sorprendidos, Natsu se pasó.

— ¡Cálmense! —Grito Erza, mientras se dirigía a los dos Dragón Slayers con la katana en la mano.

Natsu y Sting, inmediatamente se calmaron.

— Ooh, que le tienen miedo. —Grito Gajeel mientras reía, Erza le lanzó una mirada asesina.

— ¿Dijiste algo? — Dijo macabramente.

Gajeel tragó en seco, mientras desviaba la mirada.

— No, olvídalo. —Dijo mientras sonrío nerviosamente, todos los del gremio rieron.

— ¿Qué hacen aquí? —Pregunto Erza mientras guardaba la katana.

— Agarramos una misión en el Gremio que era de encontrar según la cura de la pérdida de magia, pero era falsa. Al reverso decía que éramos unos idiotas. Fue Natsu. —Acabó Sting, Erza volteo a ver a Natsu macabramente.

Sting sonrió aliviado. Le darían su leccion.

— No podrás caminar después de la golpiza que te daré. —Río macabramente, para sacar su espada y acercase a Natsu.

Sting no dijo nada, y se dirigió a la puerta. Donde se encontraba su amigo y Yukino.
Se acercó sigilosamente al oído de su amigo y susurró.

— Rogue, tú no podrás caminar después de lo que te haré. –Susurró y beso su oreja. Rogue se sonrojó todo, Gray los miro y se confundió un poco.

Rogue se estaba muriendo de vergüenza, seguía en el suelo. No podía moverse. Además.. Su amigo lo había tirado como si fuera cualquier cosa ahí en el suelo, joder.
Tenía mucha hambre.. Pero no podía decir nada, o si no Sting sacaría algo pervertido que decirle.

— ¡Déjame Erza! —Gritaba a lo lejos Natsu, vaya que se iba a ganar la golpiza de su vida.

Yukino, Sting y Rogue sonríeron. Al menos estaban con más gente.

— Más al rato regresaremos al gremio, hay que pedir algo de comer con Mirajane. —Dijo Yukino mientras le brillaban los ojos.

Rogue suspiró, esta vez no había dicho nada pervertido con lo que había dicho Yukino, ¡Gracias! Su día.. Tal vez iba a mejorar desde ahorita, o eso esperaba el.

Smut; StinGue.Where stories live. Discover now