Capítulo VII: Fiel a una misma

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(___) dejó de escribir en el ordenador para mirar al despacho del director de la cadena televisiva. Y no era la única. Todos sus compañeros estaban atentos de la fuerte discusión que se llevaba acabo ahí dentro.

-¿Pero no ves que ésto que has traído no vale nada? La gente quiere ver a sus Ídolos, no un desconocido calvo y con capa.

(T/n) se mantenía de pie con los brazos cruzados,impasible.

-Mira, Genos será todo lo popular y poderoso que quieras, pero tú mismo lo has visto. Además, el calvo,como tu le llamas, es su Maestro, y como entenderás no voy a ignorar un detalle tan importante.

-No me jodas, mujer. Éste tío no es ni de rango A, ¿cómo va a ser el maestro de nadie?

Ella se limitó a encogerse de hombros, mirandose las uñas.

En realidad comprendía el cabreo de su jefe. Le había mandado el boceto de un programa, ahora aprobado, pero el acabado no tenía nada que ver.

Luego estaba el sensacionalismo. Genos gustó desde el primer día y tenía hasta un club de fans. Y no es que no apareciera en el video...Genos tenía secuencias increíbles,pero a diferencia del boceto, el protagonista ya no era él.

Saitama se merecía ésta oportunidad. (T/n) lo sabía. Sería de rango B, si. Y pasota, y no tenía gancho para la televisión...pero cómo heroe estaba segura que a día de hoy era el mejor de la tierra.

-Mira... (T/n), no pasa nada. Igual te has dejado llevar y no has visto con claridad. Todos de joven cometemos errores.

(T/n) le miró con ojos fríos.

-Vamos a hacer una cosa. Llévate esto, quedatelo de recuerdo si quieres. Y prepara lo que tenías en mente desde el principio. Con todo lo que has documentado seguro que te da para algo decente que se adapte más a lo que el público pide.

-No.

-¿Qué has dicho?

-Esto es lo que te ofrezco. Somos periodistas y nuestra prioridad es contar la verdad. Si no estás conforme no lo publiques pero no voy a preparar otra cosa.

El hombre se levantó de su silla y apoyó las manos en la mesa.

-Haz lo que te digo. No es un consejo.

-Muy bien.

(T/n) guardó su grabación y se dirigió a la puerta. Miró a su jefe antes de salir.

-Nos vamos. (___) y yo. Sabes de sobra que los derechos del programa me pertenecen. Si veo cualquier cosa relacionada con ésto en tu canal...te desplumo a juicios.

Y salió del despacho tranquilamente, ignorando los gritos de rabia del director.

(___) se levantó de su puesto al ver que (T/n) se acercaba a ella.

-Nos vamos, recoge las cosas.

-¿Y que hay con tu programa?

(T/n) sonrió a (___) mientras acariciaba su cabeza.

-No te preocupes.Existe Internet.

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Pasaron tres días en los que Saitama no dejaba de mirar la programación televisiva. El día que tenian que emitir Súper héroes de calle pusieron una película bastante mala, y ya desde entonces no hubo ni rastro del programa de televisión.

Sospechaba que ocurría algo. El día de la grabación, cuando Genos y él se despidieron de ellas, pudo ver un brillo diferente en los ojos de (T/n). Determinación quizás...o tal vez sólo estaba obsesionado...

-Maestro...

-¿mmm?

Genos miró a Saitama con preocupación.

-¿Se encuentra bien? Lleva unos días muy raro...

-Si,si...estoy bien. Me extraña que no pongan el programa. Para una vez que salgo en la tele...

Genos pensó en (___) y en la cara de tristeza que tenía al irse. No quería comentar nada, pero echaba en falta estar con ella. Sólo había sido un día, pero esa chica le hizo sentir algo que nunca experimentó antes.

Se preguntó si ella pensaría lo mismo.¿Haría mal en llamarla? Podía poner como excusa el tema del programa...

-Genos, te está sonando el móvil.¿No lo oyes?

El cyborg salió de sus pensamientos.

-Si...disculpe....ah. Son de la Asociación de héroes.

-¡Vaya horas de llamar!

Saitama se acomodó en el suelo mientras seguía viendo la tele. Genos no tardó en colgar.

-¿Y bien?

-Quieren que me reúna con ellos. Tienen una misión importante para mi.

Saitama metió un dedo en su nariz.

-Pues que pereza. A las diez de la noche...creo que no subiré más de rango A.

Genos miró a su Maestro, un tanto dudoso.

-No me han dado información, tan sólo que es un encargo. Creo que puedo negarme...

-No hombre, te irá bien para tu trabajo como héroe. Al menos saber que es...

-Eso es cierto.¡Gracias Maestro! Voy a ir ya.

Saitama se incorporó, quedándose sentado en el suelo.

-¿Ahora?

Efectivamente, Genos se preparó un macuto con lo esencial, se despidió de Saitama y se marchó sin más ceremonia.

Saitama se quedó mirando la puerta de casa en silencio. La abrió despacio, mirando a ambos lados. No había nadie.

Cerró y se quedó en medio de su pequeño apartamento, cerrando los ojos. Lo único que podía percibir eran las voces de la serie de anime que emitían a esas horas...

Y sonrió.

-Que tranquilidaaaad.

Vale. Debía reconocer que se había acostumbrado a vivir con Genos...bueno en realidad no tenia queja: Le hacía la faena, tenía con quién hablar...era un tío legal.

Y lo echaría de menos. SI.

¡Pero que paz!

Saitama había olvidado lo que era vivir sólo y tranquilo, de modo que unos días así tampoco iban a estar mal.

Se puso una de sus pelis favoritas y preparó una cena rápida para no perder mucho tiempo.

Se sentó en la mesa,puso play al Video y fue a dar el primer bocado cuando...

DING DOONG

El primer bocado de Saitama calló al plato.Su cara, de normal inexpresiva, parecía un cuadro desolado.

-¿Pero quien...? Puso pausa a la peli para no perderse el primer diálogo, pues tenía pensado mandar a la mierda a quién fuese, y abrió la puerta con fuerza.

-¿Qué diablos pasa? Es tardísimo para ir llamando a casas aje...

-Hola, Saitama.

El héroe parpadeó sorprendido, sin saber que decir. (T/n), sonriente y con ese brillo en sus ojos gatunos, había llamado a la puerta de su casa, de noche, y a solas.

-........

-¿No vas a invitarme a entrar?

Super Héroes De CalleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora