Érase una vez...
Un inseguro de la vida
Que temblaba hasta los huesos
Nervioso estaba, si
Aquello cambiaría su vida
Hasta que vió el verde de sus ojos
Brillaban como centellas
Ese chico triunfaríaY se aferraron juntos
Así como el ancla a la cuerda
Lo hicieron ver valiente
Cuando por dentro, moría de miedo
Y el era aquel que no podías cambiar.
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Nuestras Palabras -L.S.-
RandomPequeños versos inspirados en el amor de William y Edward