- Por favor Sam, deja me ir
- No puedo Marcela, te amo por favor no me dejes
- No funcionamos, también te amo y no tienes idea de cuanto pero sera lo mejor...
- Esta bien...
- Adiós Sam
- Adiós Marshe
Y así fue mi primer rompimiento, desde entonces todo cambio.
3 años después
Soy Samantha pero me pueden decir Sam, tengo 19 años, 1.60 de altura, piel ligeramente blanca, cabello castaño claro, cuerpo sencillo, ojos claros, lesbiana abiertamente.
Desde mi primer rompimiento de corazón me volví una persona fría, egoísta, solitaria, vanidosa, con un corazón de condominio. Tenía relaciones en las cuales no duraba ni un mes por el simple hecho de que me aburrían o encontraba a otra persona, nunca era fiel, tenia novia y la vuelta de la esquina me besaba con otra. Tenia una vida deseada, hija única con todos los privilegios del mundo, fiestas y fiestas, sexo y mucho sexo, alcohol, nunca hubo drogas ni algo parecido, escuela esas en donde nunca repruebas, demasiados conocidos, ningún amigo, pero todo eso llega a su fin cuando conoces a alguien cierto? Ese alguien que te cambia la vida, alguien por quien darías la vida.
Todo comenzó un 14 de febrero...
