- Hola chicos, como va todo?- Saluda un hombre, de unos treinta y tantos años. 

- Que hay Mark.

- Veo que han traído a una amiga, es la conquista de cual de todos ustedes?- Susurra esto ultimo, parta que solo los chicos lo escuchen, pero querido Mark también lo he oído. 

- No soy la conquista de ninguno de ellos, y nunca lo seré, antes que eso prefiero comer popo de elefante con diarrea.- Dije para luego sonreír como niña pequeña cuando quiere un dulce.

- Es mi hermana.

- Ah, lo siento.- Dice sonrojándose. Ay mi dios, este hombre es muy sexy.- Bueno, que estamos esperando, tomen su armamento, los demás ya están por llegar. Chicos, ustedes prepárense afuera y dejen que Sam, se aliste aquí adentro.- Luego de esa orden, los chicos comenzaron a tomar todo lo necesario y salieron por la puerta.

- Quieres que traiga una cubeta? Digo, porque estas mojando todo con tu baba.- Dice Brad guiñándome un ojo y cerrando la puerta del recinto.

Al ver que el lugar era seguro para cambiarme, cogí un traje negro y unas botas del mismo color que había por allí. Me despoje de mi ropa, y en el momento en que estaba por colocar un pie en el traje, la puerta principal es abierta, y detrás de ella se encuentran tres chicos, quienes al ver la escena que estaba montando allí adentro se quedan paralizados. Si no tuvieran la mandíbula pegada a su cráneo, seguramente esta ya estaría en el suelo.

- QUE CARAJOS HACEN AQUÍ? LARGO! CIERREN LA MALDITA PUERTA DE UNA BUENA VEZ.- Al escuchar mis gritos, los tres chicos de inmediato cerraron la puerta.

Nunca he tenido complejos con el tener que desvestirme en publico, creo que el hecho de haber ido a una academia de baile y a un club de fútbol, hicieron que eso me parezca de lo mas normal, pero si dijera que la escena montada hace unos segundos no me dio pudor, estaría mintiendo, fue de lo momentos mas vergonzosos de mi vida. 

Termine de vestirme rápidamente y salí de allí,  reuniéndome con los idiotas, que se hacen llamar amigos.

- Ya estas lista?- Pregunta Brad, a lo que asiento con la cabeza.- Perfecto. Sam, ellos son Nathan, Ian y Theo, chicos ella es Sam.

- Hola, soy Ian, lo siento mucho por lo de hace un rato.- Se disculpa el morocho, mientras frota su nuca con la palma de su mano, en signo de nerviosismo. 

- No pasa nada.

- Quien eres?- Cuestiona el rubio, escaneandome desde la cabeza hasta los pies.

- Que carajo te importa a ti quien soy yo. 

- Es mi hermana.

- Nah, lo dices en serio? Como puede ser que una chica tan hermosa sea hermana de un aborto fallido de mono como tu. No sera que eres adoptado Maxito?- Exclama el moreno que tiene todo sus brazos cubiertos por tatuajes, que a decir verdad son muy bonitos. 

- Muérete Nate.

- Bueno, ya están listos chicos? Los equipos estarán conformados por cuatro de ustedes. El equipo rojo tendrá como integrantes a Max, Nate, Alex y Theo. El azul, como ya se habrán dado cuenta estará formado por Brad, Ian, Sam y Derek. Tomen aquí las banderas. Ya saben las reglas, pero las debo repetir, va contra las reglas disparar en el rostro, si a si lo haces, quedas fuera, tampoco puedes, borrarte una marca, o seguir jugando luego de que te hayan matado. Al golpearte una bala de pintura, debes salirte de inmediato del campo, sea de tu equipo o del rival. Cada uno tendra cincuenta balas a su disposición, no las desperdicien. El primer equipo en encontrar la bandera rival, es el ganador. Quedo todo claro?- Todos asentimos.- Perfecto, tendrán cinco minutos para esconder su bandera y escabullirse. YA!

Intrusa en Kappa SigmaWhere stories live. Discover now