-¡Yo quiero ver esta!-digo señalando una de las películas que tienen en el pen drive
-Tu siempre te tiras a por las de miedo eh.-suelta Jesús dando una carcajada.
-¿Poltergeist?-pregunta Daniel y nosotros asentimos en modo de respuesta.
Al final, después de cenar y todo, hemos decidido ver una película y nos decidimos por la que ha dicho Daniel; 'Poltergeist'.
Mete el pen drive en la televisión y selecciona la pelicula.
(...)
-Oye..., esperadme.-oímos decir a Jesús viniendo detrás nuestro.
Al final nos hemos asustado un poco por la película. Vamos a dormir en la habitación de los gemelos ya que tiene dos camas y que ellos han insistido en que durmamos ahí.
-¡Aaahh!-grito cuando noto que alguien me toca silenciosamente.
-Soy yo.-dice riendo y yo le doy un pequeño golpe en el hombro.
-¿Que ha pasado?-dice Jesús apareciendo con bate de béisbol por la puerta.
-Eh bro, ¿que haces tu con eso?-pregunta intentando contener la risa, al igual que yo.
-Por si acaso pasa algo.-dice con un hilo de voz.-Es mejor prevenir eh.
-Venga, es tarde, vayamos a dormir.-digo yo bostezando.
-Esta bien.-dicen a la vez.
Al día siguiente...
Noto como unos rayos de luz se posan en mis ojos detenidamente y los abro poco a poco, observando que ya es de día y que los hermanos Oviedo están completamente dormidos.
-¡Venga chicos! ¡Levantad!-digo dando palmadas y destapándoles.
-Og, si es pronto aun.-dice Jesús ahogando su cabeza en la almohada.
-Un ratito mas.-oigo susurrar al otro gemelo.
-Hombres...-digo y bajo a la cocina a prepararme algo de desayunar.
-Buenos días cariño.-oigo que me susurran en el oído mientras que me abrazan por la espalda.
-He preparado tortitas.-digo y le mancho la nariz con un poco de sirope.
-¡Ven aquí!-dice cuando comienzo a correr por toda la casa riendo, hasta que me atrapa y caemos los dos al sofá. Él, encima de mí.
-Esta me la debes.-dice y acorta la distancia dándome un cortito beso, el cual yo hago que se haga mas intenso hasta que entra Jesús.
-Ejem, ejem.-dice carraspeando.-Hay camas arriba, ya sabeis...
-Venga vamos a desayunar.-digo y le vuelvo a dar otro beso a Daniel.
Después de desayunar, vuelvo arriba a cambiarme de ropa ya que ayer Daniel me dejo una camiseta suya para dormir.
Me preparo y vuelvo abajo a despedirme de ellos.
-Me tengo que volver ya a casa.-digo apoyándome en la mesa.
-Yo te acompaño.-dice Daniel bebiendo un último sorbo de Nesquik.
Al cabo de un rato llegamos, este antes de que me vaya me atrae hacia el y me da un beso y me guiña su ojo izquierdo.
Nos despedimos y abro la puerta, subiendo rápidamente las escaleras y al llegar a mi habitación tumbándome en mi cama.
-¿Que tal en casa de Miriam?-pregunta Nuria apareciendo por la puerta.
-Al final me quede en casa de los gemelos. Ellos insistieron en que me quedase ya que la casa de Miriam esta mas lejos.-digo y estiro mi brazo para coger una caja de oreos.
-Tengo un dolor de cabeza increíble.-murmura ella tocandose la frente.
-Eso te pasa por beber mucho.-comienzo a reírme hasta que me tira un cojín.-¡Au!
Se va de mi habitación y prendo el ordenador para llamar a Miriam por Skype.
Después de unos cinco intentos lo coge.
-¡Me has despertado puta!-dice frotando sus ojos delicadamente.
-Anda, si es la una.-digo sarcásticamente.
-Ya me contó Jesus que ayer fuiste a su casa. Aun que me lo suponía por que no viniste.-ríe.-Me dijo que estabas muy pegadita a Daniel eh, eh.-dice mientras alza las cejas repetidamente.
-No hicimos nada malo.-me llevo una oreo a la boca.-Y Jesús que llevo un bate de béisbol a la habitación.-río recordando ese momento.
Recibo un WhatsApp de Daniel, lo abro y comienzo a sonreír cual niña pequeña.
No hace ni una hora desde que te fuiste y ya te echo de menos. 13:45.
¿cómo se puede ser tan adorable?
"Empezaste robándome una sonrisa y terminaste por robar este pequeño corazón."
ESTÁS LEYENDO
Addicted. |Gemeliers|
Fanfiction[Esta novela contiene 1 y 2 temporada] Amor es nombre de persona, lugares, abrazos y momentos. Amor son lágrimas al hombro, noches en vela y susurros al oído. Amor es perderse de la mano de alguien y encontrarse a sí mismo casi sin querer. Amor es R...