Plaza pública, cerca del jardín de Capuleto (Romeo, Benvolio y Mercutio)
ROMEO.- ¿Cómo me he de ir de aquí, si mi corazón queda en esas tapias, y mi cuerpo inerte viene a buscar su centro?
BENVOLIO .- ¡ Romeo, primo mío!
MERCUTIO .- Sin duda habrá recobrado el juicio e ídose a acostar.
BENVOLIO.- Para acá viene: le he distinguido a lo lejos saltando la tapia de una huerta. Dadle voces, Mercutio.
MERCUTIO.- Le voy a exorcizar como si fuera el diablo. ¡Romeo amante insensato, esclavo de la pasión! Ven en forma de suspiro amoroso: respóndeme con un verso solo en que aconsonen bienes con desdenes, y donde eches un requiebro a la madre del Amor y al niño ciego, que hirió con sus dardos al rey Cofetua, y le hizo enamorarse de una pobre zagala. ¿Ves? No me contesta ni da señales de vida. Con-júrote por los radiantes ojos, y por la despejada frente, y por los róseos labios, y por el breve pie y los llenos muslos de Rosalía, que te aparezcas en tu verdadera forma.
BENVOLIO .- Se va a enfadar, si te oye.
MERCUTIO.- Verás como no: se enfadaría, si me empeñase en encerrar a un demonio en el círculo de su dama, para que ella le conjurase; pero ahora veréis cómo no se enfada con tan santa y justa invocación, como es la del nombre de su amada.
BENVOLIO.- Sígueme: se habrá escondido en esas ramas para pasar la noche. El amor, como es ciego, busca tinieblas.
MERCUTIO.- Si fuera ciego, erraría casi siempre sus tiros. Buenas noches, Romeo. Voyme a acostar, porque la yerba está demasiada fría para dormir. ¿Vámonos ya?
BENVOLIO.- Vamos, ¿a qué empeñarnos en buscar al que no quiere ser encontrado?
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Romeo y Julieta - William Shakespeare
ClassicsRomeo y Julieta es la historia de un amor que nace imposible y, signado por una serie de malentendidos, acaba con la muerte de los amantes. También es el arquetipo de la tragedia amorosa. Porque los dos adolescentes de Verona, que reavivan el odio e...