Ángel → Phoebe Grey.

Capitulo uno.

Mi vida es un tanto complicada. Soy una chica segura de si misma, cariñosa, para nada agrandada, pero lo complicado no pasa por allí, sino por mi familia. Tener como hermano y padre a unos Grey no es tan bueno como se piensan, son extremadamente celosos y sobre protectores.

Hace un año y pocos días comencé a salir con un chico, grandioso cabe decir, lo malo de la situación es que tenemos que vernos a escondidas y nadie sabe de ello, esto paso mayormente por lo que pensara mi familia, ya que él es muy cercano a los Grey's, pero ya no quería más ésta situación.

Kyle, mi novio, es un chico grandioso, pero lastimosamente es el socio de mi padre y mejor amigo de mi hermano. Sabía que cuando salga a la luz nuestra relación las cosas estarian realmente tensas, pero no quería seguir escondiéndome o mintiendo cada vez que lo quería ver. Ni siquiera podíamos ir al centro para pasar el día porque teníamos a los reporteros las 24 horas sobre nosotros.

Anoche mentí nuevamente, no es que me guste pero quería verlo. Le dije a mi padre que me quedaría en la casa de Kim, mi amiga, pero sólo fue una excusa para pasar la noche con el en su departamento, donde usualmente nos veiamos.
Por la tarde, al despertarnos, decidió llevarme a casa. Siempre era la misma rutina, departamento por la noche, despertar y volver a casa, cansador.

Colocó su mano en mi muslo acariciándolo y coloque la mía sobre la de el, sonriendo. Estaba con mi celular revisando el mensaje de mi prima, Ava, preguntándome como me fue, le respondí y tome una foto de nuestras manos entrelazadas sobre mi regazo.

Abrí una de mis aplicaciones favoritas, Instagram, y decidí subirla, aunque sabía que eso me iba a traer muchos problemas, no me importó.

El camino a casa se hizo corto, me despedí de el a una cuadra de mi casa, no quería que me vieran llegar con el porque se enterarían de quien era el chico de la foto.

"te amo, ángel." susurró cuando me baje de su coche, sonrei.

"también te amo, cariño."

Camine tranquila hasta mi casa, o mejor dicho mansión. John, el hombre de seguridad, me abrió el porton y tuve que caminar por el largo pasillo de piedras hasta llegar a la puerta principal.

Abri con cuidado sin borrar mi sonrisa, pero esta enseguida se borró al ver a dos hombres parados frente a mi con sus brazos cruzados.

Un par de ojos grises y otro celestes me trataron de intimidar, pero no lo iban a lograr, soy una Grey.

"¡Phoebe Grey! dime ya quien es ese tipo." exigió mi padre rojo de la ira.

"¿¡cómo es que tenía su mano alli!?" grito histérico Theodore, mi hermano mayor, aunque sólo por un año.

"¿qué pedazo de mierda tienes en la cabeza? dijimos, ¡nada de chicos hasta los 30!" se volvió a quejar papá. "no saldrás de acá si no es con nosotros o con alguien de confianza, anda a saber si es que pasaste la noche con tus amigas o follando CON ÉL".

"¡PAPA!" grité sorprendida. "¡ya soy grande para que andes decidiendo por mi y para opinar con quien follo o no". Note como su mirada se perdía quedando completamente sorprendido ante mis palabras y sus nudillos se volvían blancos de tanta fuerza que hacia con su mano.

"¿qué?" dijo casi inaudible. Baje mi mirada arrepintiéndome por un segundo de lo que dije.

"Lo que has escuchado papá, creó que ya es hora de que te des cuenta que tengo 19 años y no 5, soy una mujer ahora." dije demostrando estar tranquila, pero por dentro no lo estaba, ni cerca de aquello.

"no." habló él confundido, mirando a mi hermano, quien estaba mirando un punto fijo en el suelo, y luego a mi. "tu eres mi pequeña, Phoebe, por favor".

"papá...".

"eres mi princesa, mi niña, nada de hombres y menos de relaciones, mañana iremos al ginecólogo." aclaró medio pérdido.

"¿ginecólogo? ¿acaso piensas que estoy embarazada?" pregunto frustrada.

"¿has tenido ya relaciones? por dios, ¿quien fue el desgraciado? lo matare con mis propias manos."

"basta papá, por favor, no te dire eso a ti." bufé, estaba a punto de largarme a llorar. Eran tan exagerado.

"¿eso es un si?" preguntó mi hermano, saliendo de su shock.

"¡no hablare de eso, es mi vida privada y mañana no iré al ginecólogo!" grité seguido de un sollozo y subí corriendo a mi cuarto, escuchando sus gritos detrás de mi. Cerré la puerta con llave y lloré apoyada en ella.

Minutos más tarde mi celular sonó, una llamada de Kyle, sin atender, me paré quitandome el vestido que llevaba y quedando en ropa interior. Cuando me acosté, volvió a sonar, pero seguía sin atender.

No creó que nos podamos ver estos días, las cosas con papá se pusieron difíciles y me tendrá vigilada las 24 horas, en cuanto pueda escaparme serás el primero en saberlo, te amo mucho cariño, luego hablamos. Phoebe.

A los segundas recibí su respuesta.

Sabes lo que pienso en cuanto a ello, sólo cuidate y no cometas una estupidez. Te llamaré mañana ángel. Siempre conseguiremos un momento para vernos, nunca olvides que te amo. Kyle.

Me he pasado la tarde durmiendo, al horario de la cena decidí no bajar y mi mamá me trajo la comida a mi dormitorio, donde me dijo que hablaría con papá y que me quede tranquila. Ella estaba enterada que me veía con Kyle y en ciertas oportunidades me ayudó a 'escaparme' para verlo, aunque nunca supo la historia completa, sólo un cuarto de parte.

Sabía que ella con sólo dos palabras podía poner a papa en su lugar, pero en este caso no creó que sea posible, no cuando es de su pequeña princesa, aunque no me faltan las esperanzas. También sabía que estaba siendo un poco exagerada respecto a el tema, pero la discusión de papá abrió algo en mi que creía ya cerrado de por vida.