Olliepan: (Segunda Temporada)

Tercer capítulo.

Se que la última vez que actualice fue...esto, hace un año (?)
Vale, pues anteriormente el capítulo estaba apunto de haber Lemmon. Pero como la Navidad pasó y soy especial aquí ya comenzará.
Aviso: Habrá lemmon. No os asusteis. Pero ni hoy ;-;

24 de diciembre por la mañana.
Creo que en su momento no dije la edad de Santiago, así que digamos que tiene doce años.

David PoV's

Santiago comenzó a moverme para que me despertara, cuándo abrí los ojos diriji mi mirada hacia el despertador.

Santiago: ¡Papá! ¡Es tarde!

David: Ya me había dado cuenta...

Me levanté de la cama.

David: ¿Que quieres desayunar?

Santiago: ¡Nada, si no está noche no cómo!

Suspire. Pensé durante unos segundos, había mucho que preparar y no tenía casi nada echo.
Perfecto.

Camine hacia donde dormía Sergio. Me acerqué a su oído y le grite. Él se sobresalto.

Sergio: ¿¡Qué haces!? -Me dijo, medio enfadado.

David: Debía despertarte.

Él puso los ojos en blanco y luego se levantó. Camino hacia la puerta y se quedó quieto.

Sergio: ¿Vienes o que?

Corrí hacia allí y le abrace, después le bese.

Santiago: ¡Qué bonito!

Me separé de él.
Caminamos los tres hasta la cocina, donde teníamos lo necesario para cocinar lo que debíamos.

Sergio: Santiago, ¿Qué tal si vas a ver la tele un rato?

Santiago: ¡Bien, no tengo que ayudar! -Dijo corriendo hacia el salón.

Sergio: No parece adoptado -Susurro riendo.

David: Tienes razón.

Comenzamos a cocinar. Bueno, realmente todo lo hizo Sergio. Por que creo que lo único que se hacer es pasta.

Sergio: ¿Cocinas algo?

David: ¿Tu que quieres? ¿Matarnos?

Sergio: Bueno, ¿quien vendrá?

David: Bueno. Creó que...No lo se.

Sergio: ¿Cómo que no lo sabes?

Rasque mi nuca. Él no dejaba de mirarme fijamente, después continuó cocinando.

Sergio: Lo siento por mandarte a hacer algo tan sencillo.

David: Ese comentario sobraba.

Sergio: Tienes razón...Perdón, estoy de mal humor.

Yo me acerqué a él y le sonreí. El giro totalmente su cuerpo, me acerqué más y coloque mis manos en sus hombros. Él colocó sus brazos en mi cintura.
Acerqué mi cara a la suya, para después juntar nuestros labios.

(22:00)

Al final logramos que viniera un compañero de clase de Santiago y su madre. La madre se llama Esther y el niño Cristián.

La mesa estaba puesta. La comida servida, pero aún no habían llegado, aún que no me extraña con la tormenta que hay.

Santiago: ¿Va a venir Cristián? -Dijo, levemente triste.

David: Claro -Sonreí. Él también, era un gran amigo suyo.

Sonó el timbre. Sergio fui a abrir, eran ellos. Los dos pasaron.

Esther: Perdón por la tardanza -Suspiro.

Sergio: Sin problemas.

Los dos caminaron hasta el salón. Santiago corrió a abrazar a Cristián, de una manera bastante bonita. -¿Romántica?-

Todos nos sentamos a la mesa. Con la tontería ya eran las once.

Los cinco no parabamos de decir tonterías. Esther era un chica muy agradable y de mente abierta, no todo el mundo es así.

Esther: Hacéis una preciosa pareja. -Dijo y después llevo su vaso a la boca y bebió.

Santiago: ¿A que si? ¡Son muy bonitos!

Esther río levemente.

Sergio: Y oye Esther, no te pregunté ¿tienes pareja? ¿marido?

Ella apartó la mirada y negó con la cabeza.

Esther: No, el murió.

Sergio: Oh, disculpa.

Ella sonrió. Y continuo comiendo. Los niños terminaron de comer primero y fueron a la habitación.

Esther: ¿Sabéis? Traje algo para Santiago.

David: Oh, no hacía falta, pero gracias.

Esther: Oye, ya son las doce. Quizá deberíamos irnos.

David: No, no mujer...Quedate, con esta tormenta no es seguro.

Esther: Iré a ver que están los niños.

Sergio: Yo también.

David: Y yo, me da curiosidad.

Caminamos hasta la habitación, yo iba primero y al abrir la puerta me lleve una fuerte sorpresa.

Esther: ¿¡Cristián!?

Los dos se estaban besando. Rápidamente se separaron.

Cristián: ¿M-Mamá...?

Ella se acercó hacia el, temí que le golpeara o algo. Pero como dije, ella tenía un mente abierta.

Esther: ¿Por que no me lo dijiste antes?

Cristian: Y-Yo...

Esther: Os dejamos solos. -Ella guiño el ojo- Viva el yaoi.

Salimos los tres de la habitación. Note como Esther sonreía.

Esther: ¿Que tiernos, no?

Sergio: No todo el mundo actuaría así.

Esther: Oh vamos. Que estupidez.

Los tres nos sentamos en el sofá y comenzamos a ver la televisión. Pasado un rato Cristián y Santiago vinieron.

Santiago: ¡Hey!

Cristián: Hola.

Sergio: Hola parejita.

Santiago le fulmino con la mirada.

Cristián: ¿Qué hacéis?

Sergio: Íbamos a ver una película de terror. Uniros.

Ellos dos se sentaron. Nada más empezar la película ya había un susto.
Los únicos que nos asustamos fuimos Santiago y yo.

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Se nota quien es uke y quien seme.

Al final edite. Santiago, eres demasiado uke.

Pero te quiero :3 (?