Capítulo Dieciocho: El regalo de Adelaide

Start from the beginning
                                    

Ese pensamiento debería perturbarme, pensar en él como el único. Pero este no es momento para distraerme.

Los músculos de su abdomen se tensan bajo mis manos. Alzo la vista hacia él y entonces llevo mis dedos a deshacer cada botón de esa camisa gris que esta usando. A medida que voy exponiendo su piel nada pálida, me voy sintiendo más y más entusiasta.

Lo que puede traducirse a sentirse más y más caliente.

Cuando saco su camisa totalmente no sé en dónde dejarla, él la toma y la arroja a algún lugar detrás de su cabeza. Me gusta como luce con sólo el lazo adornando la parte superior de su cuerpo.

No es la primera vez que lo observo sin camisa pero supongo que es la situación lo que lo hace diferente. Mis dedos casi quieren temblar de emoción cuando de deslizan y acarician suavemente desde su pecho hasta su abdomen, maravillándome con la sensación bajo mi tacto.

Me inclino hacia adelante y presiono un beso sobre su pecho, sólo por ser lo suficiente curiosa paso mi lengua suavemente por su piel antes de succionar y él maldice. Eso me complace.

—Delicioso.

Eso es todo lo que digo antes de alzarme sobre las puntas de mis pies, enredar mis brazos alrededor de su cuello y estrellar mi boca con la suya.

El beso es tan intenso y apasionado que dudo mucho que pueda o quiera tomar un respiro. Su lengua se enlaza con la mía y nuestras respiraciones dificultosas se escuchan de manera vergonzosa. Enredo mis manos en su cabello y tengo la sensación de que quiero trepar sobre él. El lazo rojo me causa algo de molestia en mi propio cuello, pero decido ignorar el roce para enfocarme en otro tipo de roce duro contra mis caderas.

Siento sus dedos presionando en mi espalda y luego el vestido es más ligero. Se vuelve lo suficiente ligero para caer al suelo alrededor de mis pies.

Me sorprende la rapidez con la que un vestido puede dejarte en ropa interior. Impresionante.

Tener un vestido nueno me hizo usar mi sujetador y bragas a juego favoritos. Siento alivio. Claro que no es encaje o seda, pero gracias a Breana supongo que para la próxima habrá algo como eso.

Es sólo unas bragas purpuras de corte bajo con un sujetador que hace cosas maravillosas para hacer ver más grande mis humildes pechos. Parece suficiente para que encender a Jocker cuando da un paso hacia atrás para observarme.

—Ahora no estoy muy seguro de quién esta recibiendo el regalo.

—Tú tienes el del lazo y yo soy la cumpleañera.

—Pero se siente como que tengo un regalo frente a mí.

—Esos halagos van a llevarte muy lejos.

— ¿Tan lejos cómo dentro de ti?

Me detengo abruptamente. Eso ha sido bastante directo y tiene todo el efecto de calentarme y hacer que mi cuerpo débil libere algo de líquido. Interesante.

Es aun más interesante verlo llevar una mano al botón de su pantalón, deshacerlo y posterior a eso bajar la cremallera revelando algo tenso siendo contenido por un bóxer azul bastante ajustado. Lo suficiente ajustado para no dejarme mucho a la imaginación.

Es tan inspirador verlo quitarse el pantalón, aunque primero para ello se quita los zapatos y los calcetines. Luego es únicamente Jocker Hans en un ajustado bóxer azul y un lazo rojo alrededor de su cuello.

El mejor regalo de cumpleaños.

Desde allí no perdemos tiempo precisamente. Se acerca y me alza haciendo que inmediatamente mis piernas se enreden alrededor de su cintura. Su boca busca a la mía y cuando la encuentra me besa fuerte y su lengua acaricia cada rincón.

Término Medio ( #1 Saga InfoNews)Where stories live. Discover now