Enana y Detestable.

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-¿Como que es él? ¿Y donde está? - pregunta nerviosa Stella.

-No lo sé. Se que trabajaba en un taller mecánico y que, además de mi, él es el único que tiene motivos para asesinarla.

-Hay que buscar a Jonathan - dice Charlie.

-Cathe ¿sabes donde queda el taller? - pregunta Stella.

-Si, pero ¿como vamos?

-Usemos el auto de mi padre - dice Charlie abriendo la puerta para salir de su habitación.

Antes de salir veo que Stella se mete al baño hablar por su celular con alguien, ya que no conocía mucho su vida, no tenía idea quién podría ser.
Ya en el auto esperamos que suba Stella y nos dirigimos al taller donde esperábamos encontrar a Jonathan.

-¿Como se llama tu novia? - le pregunto a Stella rompiendo el silencio.

-Darcy. Y tú, ¿tienes novio?

-No - dijo negando con la cabeza.

-Que raro, ¿mañana van al colegio? - nos pregunta Stella.

-Yo iré, pero como están las cosas, no creó que muchos vayan - responde Charlie.

-Yo voy a ir, creó que es una manera para distraerme un poco - respondo mirando por la ventana.

-Yo si iré, será divertido - responde Stella.

Un silencio reino en lo absoluto, cuando nuevamente, ese silencio es roto por una llamada de mi celular. Ahora por fin tenía nombre y no decía desconocido. Era Ela.

-Hola Ela ¿qué ocurre?

-¡¿Te atreves a preguntarme que diablos me ocurre?! - responde alterada.

- Bueno, cálmate.

-Que me calme, ¿donde estas Cathe? Todos seguimos aquí en mi "hermosa fiesta", la policía te esta buscando por que dicen que te escapaste de una escena del crimen siendo sospechosa, tienes que venir a ayudarme a controlar esto.

-Ahora no puedo, el que mató a Grace puede no haber estado en tu fiesta.

-¿A que te refieres? - pregunta confundida.

-Después te cuento, debo irme.

Le corto el teléfono y llegamos a la puerta del taller, hacía calor, estaba en medio de un pequeño campo, legos de la cuidad. Parecía una película de terror donde matan a los adolescentes uno por uno. Suerte para mí que en esas películas las chicas rubias son las que terminan matando al asesino. Mi corazón empieza a latir cada vez más rápido. Bajamos del auto los tres juntos, nos dirigimos a la puerta del taller, se encontraba un hombre, robusto y muy grandote.

-Disculpe, ¿se encuentra Jonathan Acun? - le pregunto con una voz angelical.

-¿Quien pregunta? - me responde una voz gruesa y desagradable.

-Me llamo Cathe, el sabe quien soy.

Me dirige una mala y desafiante mirada y va hacia adentro de lo que parecía ser una puerta. Al rato sale Jonathan.

-Hola Cathe, ¿Que quieres?

-Hola Jonathan. Quería que supieras que mataron a Grace.

-Lo sé - responde con una cara fría

-¿Como lo sabes?

-¿Acaso eso importa? - respondé.

-No. ¿Podemos hacerte unas preguntas?

-Se a lo que querés llegar Cathe y no, yo no maté a Grace. Y puedo probarlo - responde imponiéndose.

-¿Cómo?

-Ese día estuve trabajando en un centro comercial como guardia de seguridad, desde la tarde hasta la mañana.

-Recibí un llamado telefónico antes que mataran a Grace de un numero privado, Michael registro el llamado y encontró que tu numero se vinculaba. Espero que puedas explicarlo por que tengo evidencia, y si no me das una explicación coherente la llevare a la policía.

-No tengo mi teléfono con migo, antes de aceptar el trabajo, hace tres semana a mi me dieron un teléfono radio para el trabajo, para ya sabes, poder comunicarme con todos cerca. Mi telefono se lo vendí a una tal Roxana Rojas .

Apenas escucho que Jonathan dice eso, abro bien mis ojos y miro a Michael y a Stella, Roxana Rojas era una compañera del colegio, odiosa y detestable. Era de baja estatura pero siempre usaba tacos, era muy envidiosa e engreída, siempre quería llamar la atención y todos tenían problemas con ella. No me sorprendería que haya sido ella quien la haya asesinado ya que hacia dos semana Roxana y Grace se habían peleado por una situación en la que las dos querían tener protagonismo, como siempre.

-Ah bueno, lo siento - digo dándome vuelta para dirijirles la mirada a Michael y a Stella.

-¡Hey Cathe! - pego un grito que me asusto - ¿Puedo hacerte una pregunta, mas bien, intima ?

-Si claro.

-¿Ella me extrañaba o aunque sea pensaba en mi?

-Mira Jonathan - digo acercándome a el - tu ex novia, mi ex mejor amiga y actualmente difunta muerta te engaño a vos y a mi con mi novio, así que creo, con todo respeto, que las ganas de extrañarte se las sacaba mi novio.

Jonathan se quedo duro, quieto y pálido. Sin saber que mas decir me voy caminando y agarro a Stella y a Michael llevándolos al auto.

-Chau Jonii, lo siento y suerte - le digo dedicándole mi ultima mirada con compasión.

Ya en el auto, le pido a Michael si me puede acompañar hasta el salón ya que testimonio y aceptar el interrogatorio, tengo que ir ahí por que todavía nadie salio de ahí.                                                                 Apenas bajo del auto, saludo a los chicos y tomo aire, respiro hondo y entro. Cada paso que daba estaba mas nerviosa, el asesino podía estar ahí por eso quizá la razón por la que no me llamo. También no me cerraba el hecho de que Roxana le había comprado el celular justo a Jonathan, siempre fue uno come sobras de exs pero igual, algo hay.

Entro al salón por la misma puerta secreta por la que había salido, y logro ver una sombra, justo en una esquina vacía, estaba hablando por telefono y riéndose. Me acerco mas para saber quien era e intentar escuchar por que se reía tanto en un salón donde hubo una masacre.

-Jajajajajaja, no te preocupes, la mosquita muerta ya esta bien muerta, tal como vos lo dijiste.

Quedo paralizada, no podía moverme y tenia miedo por que podía verme y no se que podría hacerme escuchar esas palabras, intento acercarme mas para ver quien era, era Roxana...

Mi profesor es un modelo ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora