Viviendo con una estrella de rock. (TERMINADA)

Kurt viaja al futuro

Despierto en medio de la noche. ¿Qué? Esto no es mi casa. Esto definitivamente es la sala de Krist Novoselic... Quiero comprobarlo una vez más. Subo en silencio a las habitaciones, y por suposición, la que está toda rota, es la de Krist. Sólo hay dos siluetas. Una enorme, que es la de Krist, está en la cama. La otra, una más pequeña, está en suelo, con la cobija a medio cuerpo. Me agacho, y definitivamente, es Kurt. Tiene la boca entre abierta, y está despeinado. Esto es real. Esto es en serio. En verdad viaje en el tiempo, y estoy con ellos. Tapo mi boca para no gritar, y después cubro completamente a Kurt con la cobija que tiene. No debería estar aquí... Lo veo una última vez, y acaricio su suave y brillante cabello. Espero, por Dios, que vuelva a verlo. Pero tengo que salir de aquí. Acarició su mejilla, y después, le levanto. En silencio, salgo por la gran puerta de madera que da a la calle, y la verdad es que es un poco aterradora estar aquí. Los padres de Bruno, en estos años, vivían en Seattle, al igual que mis padres y mi hermano mayor. Quizás, pueda ir a buscarlos... Hay varias personas en la calle, pero llego sana y salva a un centro comercial de esos que están abiertos las veinticuatro horas. Busco un poco de ropa barata, ya que solo tengo mi pijama. Pero no tengo ni un puto centavo. Con vergüenza, le pido tantito dinero a unos jóvenes que encuentro, pero no hacen más que reírse y darme el avión. Así que salgo de allí. Decido, que lo mejor será regresar a lo poco que conozco, o sea, la casa de Krist. No entro. Me quedo afuera. La observo un rato, y me pregunto qué estará pasando en el 2015, que pensará Bruno, qué pensará mi familia, sólo desaparecí... Cruzo la obscura calle, y esta vez, me quedo mirando la casa que está en frente de mi... Estos malditos no saben que son vecinos de la futura banda de rock más importante de los 90's. Quizás no debería hacer esto, pero, es como si en este momento yo fuera inmortal. Si me meten a la cárcel, me secuestran, o cualquier otra cosa, no tengo más que tragarme una de las pastillas para regresar a mi época, y ya está. Abro la puerta, que para mi fortuna, no tiene seguro. Es una casa muy bonita y bien arreglada. Parece que todos están dormidos, así que subo las escaleras de mármol con cuidado. Hay un cuarto con la puerta abierta, y está vacío. Prendo la luz, sin molestarme en lo que pueda pasar. Es un cuarto totalmente vacío. Hay varios pedazos de cartón y unas toallas que cubren unas cajas. Miro por la ventana, y veo la casa de Krist. Está totalmente obscura. Me acuesto sobre los cartones, y me cubro con una de las toallas, que está llena de polvo...
Un grito ahogado me despierta. Una señora pelirroja, perfectamente bien vestida, está parada en frente de mi. La miro horrorizada, y unos segundos después, llega su esposo, o el que creo que es su esposo, con un rifle en las manos. Por un momento me asusto, si me mata, ¿qué pasaría?.
-No... Por favor... Ya me voy... Solo... Quería un lugar para dormir esta noche.- Me levanto rápido del suelo, y el esposo, me pone el lado del rifle en la espalda, y me corre literalmente así, con el rifle en la espalda. Salgo a la fría calle, y me dicen que no quieren volverme a ver y cierran la puerta con un fuerte golpe. Miro desconcertada la puerta, y una voz ronca por atrás, hace que me sobresalte.
-¿En serio te metiste a una casa a robar?- Me volteo de inmediato, es Kurt. Estoy a unos centímetros de el. Sus ojos brillan como dos perlas, y está más peinado de lo común. Su mirada es triste, y peligrosa.
-¿Qué...? No... Quería dormir en un lado...-
-¿Y el sillón de Krist?-
-Era... Incomodo.- Aún sueno muy nerviosa. Tengo que relajarme.
-¿Por qué no pasas y tomas algo con nosotros?-
-No quiero molestarlos...-
-No lo haces, ven.- Toma mi muñeca, y un escalofrío recorre mi cuerpo. Mientras entramos a la casa, una imagen de Tracy viene a mi mente. Tracy. Kurt debería estar viviendo con Tracy... ¿No es así? Me sienta a su lado en la mesa de la sala, y ahí está Krist. Me saluda con una palmadita en la espalda, y sonrío tímidamente.
-¿Viven juntos?- Pregunto incomoda.
-No, bueno. Si. Por ahora si. Mientras consigo donde vivir.- Dice Kurt.
-¿No deberías... Quise decir, no vives con tu novia o algo así?-
-Hemos tenido algunos problemas últimamente...-
-Oh... Lo siento...-
-No, está bien. Cuéntanos, tú de dónde vienes.-
Me da mucha impotencia no poder contarle. Veo a Krist nerviosa.
-No quiero ser inoportuna... Pero... ¿Puedo hablar contigo Kurt... ¿A solas?-
-Me siento un poco ofendido, pero claro. Háganlo.-
Me levanto junto con Kurt y subimos a la habitación de Krist. Kurt cierra con seguro, y nos sentamos en la cama. Lo miro fijamente.
-Eres... Eres Kurt Cobain. Es increíble...- Veo cada detalle de el. Es hermoso.
-¿Puedes explicarme qué coño pasa aquí?-
-Es un poco difícil de explicar. Tienes que prometerme, que me vas a escuchar, no me vas a tachar de loca, y además, no puedes contarle a nadie.-
-Está bien. Lo prometo.-
-No sé cómo empezar...-
-Empieza por decirme de dónde vienes.-
-Kurt, vengo del futuro. Vengo del 2015.- Se ríe.
-Oye, dame de la droga que usas, se ve que es buena.-
-Prometiste escucharme.-
-Bien, sigue con tu cuento.-
-No es un cuento Kurt. Mi mejor amigo me dio un líquido, y... Aparecí aquí.-
-Compruébalo.-
-Está bien... Te llamas Kurt Donald Cobain. Tienes un grupo, se llama Nirvana. Estás a nada de sacar un disco que se llama "Bleach". Hay canciones como Scoff, About a Girl, que escribiste por tu novia, Tracy Marander. School, Paper Cuts, etc. Tiene una hermana llamada Kimberly. Tus padres se divorciaron cuando tenias nueve años. Probaste la marihuana a los catorce. Odias a Paul McCartney, pero amas a John Lennon....- Me interrumpe.
-¿Cómo sabes todo eso?- Suena asustado.
-Kurt, escúchame. Vengo del futuro.-
-Pero, de todas maneras... ¿Por qué sabes tanto de mi?-
-No quiero decírtelo, no debería. Eres una estrella de rock. Kurt, por dios. Revolucionaste los 90's. Todo el maldito mundo te conoce.-
-Nadie me conoce.-
-No ahora, Kurt. En el futuro. Es más, mira.-
Saco mi celular. Obviamente no tiene señal, ni internet, ni nada. Pero si tiene batería. Mis fotos y mi música funcionan a la perfección.
-¿Qué es eso?-
-Es un teléfono celular Kurt.-
Le enseñó todo. Sus fotos, sus discos, sus premios, a Courtney, a Frances...
-Esto es increíble...- Dice impresionado.
-Escúchame. Te suicidaste a los veintisiete años. Y por eso vine, tengo un propósito. Salvarte.-
-Pero, si me salvas de mi muerte, tampoco existirían mis discos.-
-No Kurt. Lo hecho, hecho está. Tienes que viajar conmigo, e ir al 2015. No sé cómo funciona. Tú seguirás siendo una estrella de rock para las personas, y seguirás muerto. Pero estarás ahí, porque te traje. ¿Entiendes? Verás a Krist, y a Dave. Estarán más viejos. Dave tiene una banda propia, y Krist se la vive relajado. Podrás conocer a tu hija, ver cómo ah avanzado. O quedarte aquí. Es tu decisión.-
-Y si viajo... ¿Podré regresar aquí?-
-No. Pero no vas a perder nada. Tendrás a tus amigos con un poco más de años, pero nada más habrá cambiado. Vas a ver tus discos en las tiendas, tu cara en las camisetas de las personas... Sólo... Viaja conmigo, te lo ruego Kurt.-
-¿Estás segura de esto?-
-Cien por ciento segura. Estaremos muy bien, te lo prometo.-
-¿Puedo despedirme de Krist...?-
-No. No lo hagas. Vas a confundirlo. Esto es como una ilusión, para ellos, tú seguirás aquí.-
-Mencionaste a un Dave... ¿Quién es Dave?-
-Vas a correr a Chad, tú después de buscar, encontrarás a Dave, un baterista muy bueno por cierto.-
-Dios... Esto es muy extraño.-
-Lo sé. Tomate esta pastilla conmigo. Dame tus manos y cierra los ojos. Tenemos que darnos mucha prisa. Un día aquí, es un año allá. Bruno me dijo que un mes eran dos años, pero el que me vendió la cosa para viajar, me dijo que un día, es un año. Hay que darnos prisa.-
-No quiero hacerte más preguntas.-
-No las hagas.- Saco de mi bolsillo dos pastillas. Le doy una y se la mete a la boca. Yo hago lo mismo con la mía. Tomó sus dos manos, y los dos cerramos los ojos. Pienso en mi casa. En España. En Bruno. En mis padres. En mis hermanas. Siento un mareo impresionante. Y escucho como Kurt se queja...