The Boy Next Door

Capitulo 1

Capítulo 01

Por fin había llegado el día. Por fin me mudaría de Simi Valley a Nueva York. Había planeado desde que estaba en primer año de preparatoria que al graduarme de la universidad me mudaría a NY y tendría un empleo maravilloso. Y hasta ahora todo iba en su lugar.

-No puedo creer que de verdad te vayas a ir.-Dice Jade mientras termina de subir una caja de mudanza a mi auto. Jade ha sido mi mejor amiga de toda la vida. Hemos estado juntas prácticamente desde que nací y hoy sería la primera vez que haría algo sin ella.

-Yo tampoco lo creo.-digo suspirando.-Todo ah pasado tan rápido.

-¿Por qué de pronto tuviste que conseguir un maldito empleo perfecto?.-dice haciendo una mueca mientras cierra la puerta de mi auto.

-¿Por qué soy genial?.-digo sonriendo. Jade enarca una ceja y asiente.

-Por qué eres Shailene Woodley.-dice abrazándome.-Maldicion voy a extrañarte.

La abrazo aún más fuerte. Jade ah estado conmigo en cada momento. Desde que mis padres se separaron hasta cuando mi madre comenzó a viajar por todo el mundo. Siempre estuvo ahí.

-Prométeme que vas a llamarme y contarme todo acerca de tu trabajo y tu departamento.-dice señalándome.
Asiento rodando los ojos y subo a mi auto. Me despido de ella agitando mi mano y enciendo el auto.

Adiós Simi, Hola Nueva York.

.....

El viaje había sido largo. Bastante largo pero por fin estaba aquí. Era todo un mundo de diferencia para una pequeña chica de California. Le di una rápida mirada al estudio fotográfico en el que trabajaría y después decidí que debía de ir a conocer mi nuevo departamento. Ubicado en una buena zona y en el tercer piso de un edificio clásico pero a la vez moderno. En la recepción del lugar se encontraba un hombre de mediana edad con gafas y cabello canoso.

-Buenas tardes señorita, ¿pueda ayudarla?

-Si, yo eh alquilado el apartamento en renta del tercer piso.-digo sonriendo.

-Ah, señorita Woodley.-dice sonriendo.-Un gusto, soy el señor Charles, ya la estaba esperando.

Sonrío y veo cómo saca unas llaves de una pequeña cajita de madera.

-Aquí están sus llaves. Déjeme llevarla a conocer el lugar.

Asiento y ambos subimos al ascensor. Al llegar a mi nuevo piso este se veía acogedor y limpio. El señor charles me ayudó a abrir la puerta y Dios...el apartamento era todo lo que buscaba. Era perfecto. Sonreí emocionada.

-Es perfecto.-digo en voz alta.

-Lo es y a un precio accesible.-contesta mostrándome la sala de estar y las habitaciones.

-Muchas gracias. Dentro de pocos días adelantare otro mes de renta.

El señor Charles asiente y después me ayuda a traer las cajas de mudanza y mi equipaje. Al termine de guardar mi ropa y pertenencias miro al lugar casi vacío a excepción de unos cuantos muebles. Mis fotografías ya están colocadas en la pared y las mesitas de estar pero sigue sintiéndose vacío. Tal vez después consiga algo para decorar, tal vez papel tapiz o alfombras.

-¿Cómo es?- pregunta Jade al otro lado del teléfono.

-Es lindo. Grande y tiene una vista hermosa.-digo mientras observo los edificios de Nueva York a través de mi ventana.

-Dios no puedo esperar para visitarte.-dice Jade emocionada.

-Y yo no puedo esperar a que me visites.-contestó.

-Será genial. Jade Collins y Shailene Woodley conquistando Nueva York.-dice riendo.

Continuamos hablando por un poco más de tiempo hasta que Jade tuvo que irse. Me quede pensando en que podría hacer para matar el tiempo así que decidí tomar una ducha. La bañera era grande y bonita. Los azulejos eran color turquesa y además había una tina. Sonreí al pensar en lo feliz que me hacía tener el apartamento de mis sueños y después abrí la llave del agua para que comenzará a regularse la temperatura. Encendí las bocinas donde conecte mi iPod y 2 On de Tinashe comenzó a sonar. Me metí al agua cantando la canción mientras colocaba shampoo en mi cabello.

-I want to get you On.-cante mientras enjabonada mi cuerpo.

Un ruido se escuchó en el departamento haciéndome sobresaltar un poco. Ignoré el ruido y continúe cantando. Otro ruido y ahora sí me alarmé. Cerré la llave del agua y me quede en silencio. Parecían ser pisadas. Nerviosamente tome la toalla y me envolví en ella. Apague la música y me quede en silencio. Estaba segura de que esos ruidos eran pisadas.
Lentamente camine hacia la puerta y la abrí solo un poco.

Nada. No había nadie. Solo la luz de la lámpara de la sala encendida. Fruncí el ceño y cerré de nuevo la puerta. No estaba acostumbrada a vivir sola, tal vez y solo estaba delirando. Cepille mi cabello aún mojado y limpie el espejo que se había empañado.

Abrí la puerta por completo y grite como nunca lo había hecho. Casi me caigo de espaldas al ver a un chico frente a mí mirándome extrañado.

¿Pero qué?

Oh Dios. Mátenme ahora mismo.