Tom se volteó sin disimulo alguno y pudo ver a Marco bebiendo, luego le vió sonreír en medio de la charla con el otro chico, le pareció tan encantador. No estaba seguro de cómo, pero cada gesto proveniente del castaño le hacían sentir un sin fin de sensaciones que le ponían ansioso. Sin mas rodeos se puso de pie y caminó hacia el chico.
Bill no tuvo tiempo de detenerlo, ni siquiera notó cuando su compañero se puso de pie y se marchó, para cuando se dio cuenta el otro ya iba a unos cuantos metros caminando, No hizo nada, solo bebió un ultimo sorbo antes de colocar el vaso de vidrio sobre la mesa, luego prosiguió a seguir al otro demonio.
. . .
Dipper no paraba de reír de las absurdas anécdotas que Marco contaba, al parecer compartían ciertas similitudes, ambos eran unos "nerds" según sus familiares y amigos, ademas de ser increíblemente pacientes con las hazañas causadas por una chica energética y despreocupada. Hacía tan solo unos pocos días que conocía a dicho castaño, a pesar de que Mabel y Star llevaban un buen rato siendo amigas él no había tenido la oportunidad de conocer al mejor amigo de la rubia.
—No veo a Mabel por ningún lado. — Dipper alzó la mirada en alto tratando de localizar a su hermana, pero le resultó imposible, solo veía una gran masa de gente bailando en la pista.
—Mh... — Marco imitó la acción de su compañero — Tampoco veo a Star, ¿Crees que esten bien? — Se sentía un poco preocupado, conociendo como era la rubia sabía perfectamente que no era para nada bueno si esta se perdía.
—Quizas... — Respondió bajando la cabeza y mostrandose mucho mas despreocupado que el otro chico, su hermana era de meterse en problemas, pero ultimamente era capaz de resolverlos por sí misna, vamos, Mabel ya era una chica grade. Dio un ultimo sorbo a lo que quedaba de bebida en su vaso y continuó —Si no están por ahí de seguro subieron a los baños.
Marco asintió y dejó escapar un "Ya veo" mientras giraba levemente la mirada hacia los baños de arriba. A los pocos minutos él también quiso ir asi que le pidió al otro castaño que le cuidase un par de pertenencias —En seguida vuelvo — dijo mientras se daba media vuelta para marcharse.
Diaz no tuvo muchas opciones, tenía que cruzar casi por medio de la pista de baile para dirijirse a los baños, eso sería incomodo puesto que si alguien lo invitaba a bailar no sabría exactamente que hacer, el joven procuró caminar con la cabeza baja todo el trayecto para pasar desapercibido.
Tan solo un par de metros más y saldría de todo el conjunto de personas, varias veces había chocado y resibido uno que otro empujón, todo eso le hizo fruncir el ceño y recordar las razones de porqué él prefería mil veces quedarse en casa viendo una buena película de acción o terror antes de tener que salir a lugares repletos de personas molestas, tales como ese. Mientras intentaba salir de la pista principal, el chico pudo sentir como una mano le impedía avanzar, volteó para ver de qué se trataba.
—¿Por qué tan apresurado? ¿No quieres bailar un poco, encanto? — Un completo extraño había tomado posesión de él, el menor negó con la cabeza y un par de palabras timidas escaparon de su boca para decir que realmente no tenía ganas de bailar, pero parece que el extraño solo lo ignoró.
Ambos bailaban, mas que todo el extraño sujeto puesto que Marco solo quería zafarse de aquello, cuando el castaño intentó darse la media vuelta y marcharse el otro le impidió nuevamente hacerlo. Esto se estaba volviendo realmente incomodo para el menor.
Se hallaba al borde de darle un golpe para que le dejase en paz, pero al parecer alguien más se le adelantó con eso, pudo ver claramente como el extraño recibía un gran puñetazo en la cara, quiza ese golpe fue mas rudo de lo que debía ser. El castaño abrió los ojos con sorpresa, se mostró atoníto al ver de quién se trataba, era...
— ¡¿Tom?! — dijo quedandose boquiabierto
— ¿Que rayos crees que haces? — Respondió el demonio frunciendo el ceño
— Eso debería preguntarlo yo, ¿No crees?
El mayor lanzó un bufido molesto y tomó al otro fuertemente de la muñeca para arrastrarlo fuera de la pista. Marco no dijo nada, ni siquiera se intentó liberar del agarre, ¿La razón? Ni él la sabía. Supuso que tan solo era curiosidad.
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N/A: No me odien por dejar el final del capítulo así, si lo continuaba se iba a volver muuuy largo.
Creo que con este cap pude compensar lo mal narrados que están los capitulos anteriores, o por lo menos eso creo yo xD algún dia me voy a poner a editar el cap 1 y 2
Tengo buenas y malas noticias, la mala es que no podré actualizar este ni ningún otro de mis fics hasta el 23 de diciembre :'( tengo que estudiar para un examen y no tendré tiempo de escribir </3
La buena noticia es que habrá lemon sensualón en el próximo cap. (?
Y eso es todo, nos leemos en el proximo cap!
Capítulo III: Encuentro
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