0.

9.9K 848 584
                                    

Levi desde hace tres meses que había perdido su empleo, no porque hacía mal su trabajo, sino porque la empresa se encontraba en quiebra y no podían retener a sus empleados aunque quisieran.

Logró vivir un tiempo con los ahorros que había estado guardando, pero comenzaba a quedarse sin dinero y estaba más estresado que nunca. Intentó buscar algún empleo decente, pero simplemente no hallaba uno indicado o terminaban coqueteando con él.

Su amigo Erwin le había comentado de un club bastante elegante en donde hacen grandes subastas y sólo llegan personas con mucho dinero para pagar por un poco de cariño, en realidad literalmente pagaban por tener a alguien viviendo bajo su mismo techo por unos meses, o semanas. Cuantos más días eran, más dinero se podía conseguir en tan sólo unas apuestas.

Levi se molestó un poco al pensar en participar para conseguir dinero, tenía muy en cuenta que no había más opción que intentarlo, pero el problema era... ¿Qué clase de persona lo compraría? ¿Acaso alguien daría miles de billetes sólo por estar con él? Suena hasta ridículo.

Él no se consideraba desagradable, pero tampoco lindo, aunque también debía admitir que treinta y cuatro años era mucho, ya estaba un poco viejo para intentar venderse a sí mismo.

Erwin le dijo que se miraba muy joven como para que alguien notase su verdadera edad, podía llevarlo y decirle al jefe del club que lo dejara entrar, estaba seguro que muchas mujeres y hombres pagarían por él.

No es que Levi fuera homofóbico, sólo nunca ha salido con alguien que lograra llamar su atención, de alguna u otra forma estaría vendiendo su virginidad, y eso es demasiado vergonzoso. No pensaba decirle ni a su mejor amigo que era virgen, aunque Erwin ya lo sabía muy bien en el fondo.

...

Esa misma noche Levi se convenció de intentarlo, y para eso tenía que lucir muy elegante y a la vez atractivo, no podía pasar esa oportunidad aunque fuera estúpida. Sólo estaría un par de semanas con esa persona y luego se llenaría de dinero mientras encontrara un empleo fijo.

Vestía un traje negro ajustado a su cuerpo, se había esmerado en verse bien, y aunque estaba muy nervioso lo aparentó mientras el taxi lo llevaba a la dirección que Erwin le había enviado por mensaje en su teléfono.

Al momento de que el taxi se detuvo, comenzó a reflexionar si hacerlo o ser un desempleado de por vida. Mordió su labio inferior molesto y salió del auto antes de arrepentirse.

Había un enorme edificio lleno de personas aún más elegantes que él. Las grandes puertas se encontraban abiertas para cualquier cliente millonario, se notaba que no cualquiera asistía a un lugar como ese. Caminó sobre una alfombra roja, y sintió varias miradas curiosas.

Se llenó de valentía y se acercó a un tipo que estaba dirigiendo a los que pensaban en venderse. Aquel hombre era muy atractivo y joven, probablemente también piensa hacer lo mismo.

—Buenas noches. — saludó Levi bastante frío

—Hola, soy Asashi, es un placer conocerte. Supongo que estás aquí por parte de Erwin, ¿no?

Y en ese momento Levi se preguntó si su amigo había comprado a alguien para tener compañía, algo que le pareció bastante gracioso.

—Así es, estoy consciente de que quiero participar.

Asashi sonrió nervioso al ver la expresión neutra y dominante de aquel pequeño hombre.

—Lo sé, está por empezar, así que debes subir al escenario junto a los demás chicos. Pero antes debes firmar esto. — dijo entregándole un contrato de confidencialidad. —Nadie se hace cargo de lo que pueda pasarte o lo que haga el comprador contigo, para eso ellos están en la obligación de tratarte bien y mantener todo en secreto. Erwin me dio mucha información sobre tí, así que no fue necesario hacerte alguna entrevista o exámenes de salud, confiaré en mi amigo.

Vendido. |ErenxLevi|Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz