Edad A Distancia (REMAKE)

7° Al revés~

Sandía: Jajaja

SEAI: No te burles! Sufrí mucho ;-;

Sandía: Jugaron con tus ilusiones, Andy?

SEAI: Si...

Sandía: Tú sabes que jamás me encontrarás.

SEAI: Um... ¿Que apostamos para decirme donde vives? c:

Sandía: Hey, le estas preguntando eso a una niña de 11 años?

SEAI: ...

SEAI: Debo tener cuidado con tu edad :v

Sandía: No me recuerdes que ya te enteraste!

SEAI: Pero tu empezaste!

Sandía: Cierto, perdona... Bueno, ya son más de la 1 de la mañana, tengo que dormir.

SEAI: ¿La pequeña niña va a tomar su siesta?

SEAI: Una cosa más!

Sandía: Dijiste lo mismo hace una hora, no me cautivaras esta vez Andy.

SEAI: Ya entendí la indirecta, adiós :c

Sandía: Hasta mañana ignorante!

SEAI: Hasta mañana Loli :D

Sandía: Idiota...

Me despedí de Ángela de la manera más rara posible y me puse en posición fetal en mi cama para poder dormir.

(.......)

—¡ANDY-SAMA! ¡ANDY-SAMA! -. Apenas abrí los ojos me encontre con mi hermana gritandome mientras saltaba en mi cama.

—¿Acaso uno no puede dormir tranquilo? -. Hice un puchero empujando a Ana al piso.

—¡Auch! No cuando tienes colegio, sólo faltan diez minutos para que empiecen tus clases — me sobresalte levantándome rápidamente —. Se nota que te has dormido tarde.

Soy muy predecible al parecer.

—¡¿No podías levantarme antes?! -. Le grite sacándola de mi cuarto.

—¡Lo estuve haciendo hace más de media hora! Debería estar viendo el nuevo OVA de Tokyo Ghoul. ¡Malagradecido!

Realmente, los Otakus, no tienen remedio.

Apenas le cerré la puerta me cambie en 20 segundos con la tecnica de Goku. Me puse algo casual por así decirlo. Acomode mi cabellera y me senté en la mesa del comedor para agarrar un sándwich llevándolo directamente hacia mi boca.

Logre ver a mi madre furiosa por mi tardanza, pero ella sabía que no tenía tiempo de escuchar sus sermones.

Corrí hacía mi secundaria y por suerte, llegue temprano. Faltaban 2 minutos para que empezaran las clases. Me observe de pies a cabeza, no sudaba tanto. Abrí la puerta del salón para encontrar encontrándome con un profesor presentando a una alumna.

—Señor Esteban, llega muy tarde, justo ahora me encontraba presentando a una alumna que falto durante dos meses por problemas.

Mire la hora de mi reloj. Que raro, aquí dice que justo ahora empezarían las clases. Cuando de pronto me di cuenta, que mi reloj estaba malogrado y esta atrasado 20 minutos. Me maldije a mi mismo y corrí hacia mi asiento disculpandome.