¡Dame un hijo!

Epílogo

La mañana es fresca por la aparición de una tenues llovizna que ha empapado las calles, el olor de la tierra mojada y del pavimento caliente ha provocado nauseas a Karen, ella a un lado de la carretera está vomitando mientras Yaicón con ternura le acaricia la espalda, esperando paciente que a ella se le pase el malestar.

¡Esto es por tu culpa! __ le dice mientras se quita la mano de él.

Lo siento, amor, no tuve ninguna intención__ decía mientras sonreía, siempre que vomitaba le recordaba que él era el que la había embarazado, y eso era música para sus oídos__ te siente mejor__ le pasaba un pañito húmedo.

Ella lo tomo y se sentó en el auto a esperar que le pasara el malestar__ Tú tienes la culpa, de esto__ respiraba agitada __ tú y tus extrañas ideas.

Hay vamos, no es para tanto __ se subió y encendió el auto __ la verdad hay otra cosa que me preocupa__ se quedó callado con deliberada intención.

¿Qué te preocupa? __ lo miraba con curiosidad.

Que nos nazca una niña__ reía al verla ahora enfada, desde que se embarazó, ella es un sin número de emociones, de la alegría a la tristeza, de la tristeza al enojo__ ¿Te parece?

Ni lo pienses, solo voy a tenerte este y nada más, si es niña te aguantas__ le decía furiosa.

¡Duerme un poco! __ le acomodo el sillón, sin apartar la vista de la carretera.

Ella durmió, él se sentía muy, muy feliz, iban de camino a la mansión de campo de sus padres que aún no sabían la maravillosa noticia. Ella no le había permitido que él les dijera nada, él acepto, solo para complacerla.

Llegaron y fueron recibidos por los Treviño llenos de gozo, no cabían de la felicidad al saber que tendrían un nieto.

Hay que celebrarlo__ dijo Eloísa, sus ojos derramaron algunas lágrimas de la emoción que la embargaba.

Mujer no llores__ dijo Elmer abrazando al hijo __ gracias hijo, amado__ besaba a Karen y la besaba emocionado__ gracias pequeña, le has dado una enorme alegría a este viejo.

¡Oh don Elmer!__ decía avergonzada, ella jamás imagino que ese hijo fuera tan anhelado y deseado por tantas personas.

Pero, Yaicón, cariño, ese niño debe nacer en un hogar establecido como debe ser__ dijo la madre, con seriedad __ ustedes se deben casar.

¡Oh, no!__ dijo Karen renuente al tema del matrimonio __ nosotros no pensamos casarnos__ dijo y salió de la gran sala para evitar que la siguieran presionando.

¿Qué pasa, Yaicón? __ dijo el padre mirándolo con curiosidad __ porque ella no quiere casarse, no se lo has propuesto.

Si padre, pero ella no quiere__ lo miraba con tristeza y cabizbajo.

¿La amas? __ lo miraba con curiosidad __ Yaicón por favor contéstame, ¿la amas?

Si viejo, me muero por esa mujer__ lanzo un suspiro de inconformidad __ he tratado de demostrárselo de una forma u otra, pero ella no me ama__ le explicó.

Hijo se los has dicho, le has dicho que la amas__ lo miraba con ternura__ a los seres humanos nos gustan que nos digan lo importante que somos para otras personas, y las mujeres son seres muy especiales, ellas son vaso frágil, hay que tratarlas con delicadeza, así que mira como pero dile que la amas.

Si, viejo haré lo posible.__ dijo melancólico.

Eloísa alcanzo a Karen al jardín al salir ella de la gran sala de la mansión.

¡Karen, espérame por favor! __ grito para detener la huida de la joven __ ¿Qué te pasa, niña?

Ella llorando, trataba de esconder la lágrimas, pero la mujer la tomo de los hombros y la giro para mirarla a los ojos__ ¡Por favor, déjeme ir! __ Ella suplicaba.