Casada Con Mi Exquisito Jefe [EDITANDO]

CAPITULO 8

Cuando despierto son las 7 y yo estoy hecha un asco, me duele mucho la espalda creo que dormí muy mal en el sofá por el imbécil que solo me ha hecho la vida mas difícil.

Todo estaba tan bien cuando el no habia llegado a mi vida, ¿Me pregunto como una persona puede llegar y cambiarte la vida en un día?.

miles de preguntas abundan en mi cabeza en busca de una respuesta lógica, ¿Porque me pasa esto a mi?, ¿Porque el me escogió a mi de tantas mujeres que morirían por estar en mi lugar?, ¿Como es posible que pueda estar casada con un hombre que no conozco y el cual no amo?.

No quiero imaginarme como sera mi vida ahora en adelante, Tal vez llena de temores a el convivir con alguien que no conozco, mi vida sera infeliz llena de lágrimas y llanto, ¿Sera que me golpeara? No quiero que me golpee, no quiero volver a sentir golpes en mi cuerpo, no quiero volver a sentir ese temor al ver que alguien se me acerca, no quiero volver a estar en mi vida pasada yo ya la deje atrás.

Ante estos pensamientos el llanto abunda en la sala de mi piso, No quiero volver ha ser infeliz, no quiero volver a sentirme como liam me hacia sentir. Ese es mi pasado y no quiero volver atrás.

¿Pero que hago? No puedo pensar en eso porque ya fue tema superado, eso no puede volver a afectar mi vida, ya soy una nueva persona con un nuevo carácter, ya soy feliz y nada puede intervenir en eso.

Seco mis lágrimas y me paro del sofá, miro el reloj ya son las 7:50 ¡¡DIOS!! ¿cuanto tiempo paso? Pero no, hoy no voy a ir a trabajar no le quiero ver la cara a ese tipo, que se las arregle como pueda.

Me dispongo a ir a mi cuarto lavo mis dientes y entro a la ducha abro el grifo y enseguida siento como el agua caliente se desliza por mi piel morena, después de darme un largo y placentero duchaso voy a mi armario y opto por ponerme una blusa verde de tira y un leggins color negro, dejo mi cabello crespo suelto y bajo para preparar mi desayuno, tengo un hambre feroz.

Preparo lo único que se preparar, no entiendo como me puede gustar tanto la comida y no saber prepararla, debería aprender a cocinar, me siento en la alfombra blanca, enciendo el televisor he inicio a comer, después de haber terminado me voy a la cocina lavo la losa y me siento nuevamente a ver tv.

Mi móvil inicia a vibrar y enseguida lo tomo miro la pantalla y veo que es dayana.

-Hola princesa, ¿como estas?!! -Digo eufóricamente.

-Hola gin, ¿te pasa algo?, ¿estas enferma?, necesitas ayuda -Dice preocupada.

-oye calma, no me pasa nada estoy bien.

-¿Por que no viniste a trabajar?.

-porque no quise -Digo sin Darle importancia.

-Woo y ¿tu que te creer? ¿la dueña de la empresa o que?-Al escuchar eso la sonrisa se esfuma de mi rostro.

-No -Digo seca.

-El súper sexy señor jhonson pregunto porque no habías venido a trabajar y yo le dije que estabas indispuesta, ¿hice bien?.

-Si, hicisteis muy bien.

-Oye picarona ¿que te traes con el señor jhonson? -Pregunta en tono meloso.

-Nada.

-mmmm no te creo, porque el se veía preocupado.

-Que le den.

-Bueno amiga te dejo ya acabo la hora del almuerzo.

-Chao dayana, cuidate y me saludas a las chicas.

-Bueno igual- Dice y cuelgo el teléfono.

Ese imbécil preocupado por mi, no lo creo, ese solo se preocupa por si mismo.

llamo a domicilio pido comida china Y en menos de 30 minutos esta el repartidor tocando la puerta.

-Que eficiente eres- Digo abriendo la puerta.

-Gracias.

Tomo la cajita y pago a el repartidor me siento en el sofá e inicio la cita con el amor de mi vida, Cuando termino recojo todo, miro el reloj son las 2 asi que decido arreglarme para salir.

me levanto del sofá y escuchó que tocan la puerta, ahh ¿ahora quien sera?, me dirijo hacia la puerta cuando la abro...

-¿Que haces aquí?. Digo furiosa

El señor jhonson entra a mi casa sin autorización y con cara de pocos amigos.

-¿Porque no fuisteis a trabajar?.

-porque no se me dio la gana, ¿Algún problema?.

-no puedes faltar al trabajo porque si.

-Claro que puedo, O ¿que acabo de hacer?. Digo retándolo.

-No me Retes.- Dice frunciendo la nariz.

-Imbécil- Digo sentándome en el sofá. -  ahora ya te puedes ir.

-Arreglaté que no tengo tiempo.

-¿Que me arregle?, ¿para que quiere eso?.

-¿para qué? Tienes que ir a trabajar, eres mi secretaria y te necesito.

-Que te den, Arreglatelas como puedas- El Enarca una ceja y esboza una media sonrisa.

-vamos pequeña, no tengo tiempo- Dice sentándose en el sofá.

¿Acaso tengo otra opción? Sera mejor que haga lo que me pide, Porque al contrario no vamos a dejar esta tonta discusión.

-Esta bien! Ahh, por sierto no me digas pequeña que no soy tu pequeña, imbécil- Digo parándome del sofá y  llendo a mi habitación.

me dirijo a mi armario y me pongo un vestido blanco con lunares rojos y unas sandalias doradas y bajo a la sala.

-Estoy lista- Digo tomando mi bolso y mis llaves.

-se te ve muy linda-. Dice parándose del sofá.

Le muestro mi lengua en un acto infantil caminando a la puerta, Escucho una risotada, y luego unos pasos.

Cuando salgo recuerdo que no tengo coche y no se como nos vamos a ir.

-¿En donde nos vamos? Taxi, metro, autobús? Tu eliges.

-No.

-¿No que?.

-nos vamos en mi coche- Dice volteandose y dejándome parada en medio de la calle.