Capítulo único

2.7K 326 178
                                    

Otoño
10:36 am
Los Angeles, CA, Estados Unidos

Era una mañana de otoño cuando por fin decidí sacarme toda esa basura.

Mis manos se cerraban en puños al borde de mi chaqueta, solo en un intento fallido de contener mi ansiedad.

A decir verdad no me sentía listo para dar el primer paso, realmente no estaba seguro de si algún día de verdad lo estaría. En esos momentos solamente quería tomar una botella de algo y embriagarme para olvidar todo, así como había hecho desde hace tiempo, cada día, cada hora...

Me reprendí a mi mismo por mis pensamientos negativos, al mismo tiempo que relajaba mis manos y fijaba la mirada al frente.

Me puse de pié y caminé sin prisa hasta el escenario, me acerqué al micrófono, inhalando hondo para darme algo de valor, sorprendiéndome de lo mucho que me faltaba últimamente.

Debía ser fuerte.
Debía superarme.
Debía dejar esa mierda del alcohol y las drogas.

Lo haría por mi familia...

Me lo había repetido tanto, que ahora era una especie de discurso en mi cabeza.
Volví a tomar aire y comencé.

- Buenos días - dije, en un tono mas amargado de lo que me hubiera gustado. Carraspeo. - Mi nombre es Alfred F. Jones, Alfa. - No puedo evitar pensar que hace unos años lo hubiera dicho con orgullo, con emoción y alegría... Hoy solo salió como si estuviese admitiendo una triste verdad, y es lo que hago. - Y soy alcohólico- confieso, sintiendo asco de mi mismo, y rogando por no volver a repetirlo. - También soy adicto a muchas drogas de las que ya ni siquiera recuerdo sus nombres.

A diferencia de lo que creí, todos en la sala me prestaban atención. Una mujer que que se encontraba en el fondo levantó la mano.

-¿Podrías contarnos cuándo comenzaron tus problemas? - preguntó, en un tono suave y agudo. Parecía tener miedo de que su pregunta me molestara.
Comencé a sentir pena por ella, parecía haberlo pasado mal, al igual que yo.

Al igual que todos ahí.

- Fué hace tiempo. No recuerdo cuantos años. ¿Tres? ¿Cuatro?... - susurro.

Aún no puedo olvidarlo... ¿Como podría?

- Todo comenzó hace unos años, cando conocí al amor de mi vida.- comencé a contar, reviviendo cada recuerdo que había estado luchando por borrar de mi mente. Volví a inhalar con fuerza.

- Él era precioso; Rubio, de hermosos ojos verdes. Podías perderte fácilmente en ellos.
Su nombre era Arthur, era un omega. Y yo lo amé desde el momento en que cruzamos palabra.
Siempre se enojaba por cualquier cosa, era adorable...

Incluso en estos momentos no puedo evitar sonreír de sólo recordarlo.

- Físicamente, lo que más me atraía de él eran sus ojos, y sus labios. Podía besarlos todo el día y jamás podría cansarme.

- Cada que hablábamos sus mejillas se tornaban de un hermoso tono carmesí que solo provocaban mayores ganas de besarlas. - mis manos apretaron los bordes de aquel podio color caoba obscuro, intentando con fuerza que mis ojos no se humedecieran.

Joder, lo amaba...
Lo amaba con toda la fuerza de mi corazón.

- Y fué hasta mi cumpleaños de ese mismo año en que me enteré de que él también estaba enamorado de mi...
Fué uno de los mejores días de mi vida. Lo abracé, lo besé y le solté toda una cursi palabrería romántica.- no puedo evitar reír, el solo recordar parecía revivir su risa, sus besos, sus caricias... Incluso sus burlas cuando yo le hablaba de esa forma. Una lágrima salió de mis ojos, obligándome a quitarme los anteojos para limpiarla.

Papá en el cielo. [UsUk] Where stories live. Discover now