F O U R

1.8K 132 120
                                    

Estaba sentada tomando una gaseosa, sinceramente estaba demasiado aburrida. Desde que Courtney había llegado Ross me había ignorado olímpicamente y solo respondía un "aja" cuando le hablaba.

Joder, maldito Ross Lynch.

Raini se acercó a mí cuando veía a mi rubio "amigo" haciendo una chuza.

--Que tal carita tienes ¿eh?—dijo sentándose a mi lado.

--¿Cómo debería estar? Desde que Courtney ha llegado ni me mira—solté un bufido.

--¿Estas celosa?

--No lo sé, pero siento algo muy feo cada vez que él le sonríe.

--No tienes derecho a reclamarle nada Laura, ambos son solo amigos, legalmente hablando.

--¡Lo sé!—levanté mis brazos y los dejé caer como gesto de frustración—pero cada vez siento que lo amo mucho más.

--Ay amiga, yo creo que deberías hablar bien con él y definir lo que sea que tengan.

Rydel se acercó a nosotros lo que me impidió responderle a mi pelinegra amiga.

--¡Chicas! ¿Por qué esas caritas?

--Pues ustedes están ganando—respondió Raini.

--Cierto pero no se preocupen, ya van a ganar.

--Ojalá...

Los Lynch's y Courtney se acercaron a nosotras.

--¡Eres fantástico!—escuché que Courtney le decía a Ross.

--Lo soy—se encogió de hombros.

--Egocéntrico—dijo la chica.

Ross le sonrió y sip, mi corazón se ha roto.

--Ya son las...—dijo Riker mirando su reloj de mano—20:00 hrs.

--¡Oh Dios! Me tengo que ir—dijo Courtney.

--¿tan temprano?—le cuestionó Ross—quedate un rato más.

--Desearía hacerlo pero no puedo, tengo una sesión de fotos ahora así que adiós—dijo y comenzó a despedirse de todos con un beso en la mejilla.

--Adios Lauri—dijo cuando llegó a mi lugar—ha sido un gusto conocerte.

Maldita zorra...

--Lo mismo digo—traté de no hacer una mueca de molestia cuando me dio el beso.

--Adios Rossy—dijo y le dio un beso muy cerca a los labios.

¡MALDITA HIJA DE...!

--Nos vemos Courtney, ya tienes mi numero así que no perderemos el contacto.

Ella se fue y Raini se agachó para susurrarme.

--Ya era hora.

--Vamos a cenar ¿qué les parece?—cuestionó Kevin.

--¡Gran idea!—exclamó Calum con emoción—Vamos al restaurant italiano que está a unas cuadras de aquí.

--Perfecto—dijeron los Lynch's al unísono.

Todos cogimos nuestras cosas y yo me alisté para ir.

--¿Ya estás lista?—susurró el chico que me robaba el aliento a diario.

--Sí—estaba molesta y no iba a caer tan fácilmente.

Me levanté rápidamente dispuesta a ignorarlo pero me tomó del brazo.

Wildest Dreams || Raura ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora