d o s

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Plan desplaneado.

—¿Quién es el bebé más hermoso de casa? ¿Quién? ¿Quién? —farfulló Jongdae, afilando esa sonrisa y pellizcando sin fuerzas las regordetas mejillas de D.O.

O Kyungsoo, como todo mundo en esa casa, hasta la servidumbre, le llamaba.

Kyungsoo sabía lo difícil que sería convivir con la panda de locos que rodeaban a Kai, pero cuatro días, cuatro largos días y ya se estaba volviendo loco él mismo. Todo mundo tenía que ver con su singular forma de ser, todos decían que era muy serio cuando tenía que ser un niño risueño, y que tenía un amor extraño y empalagoso hacia Kai.

Por supuesto, tanto amor de su parte estaba debidamente justificado. Debía conocer a su enemigo más mortal, y no sólo se refería a verle el trasero cuando se quitaba la ropa sin contemplar que él era un bebé inocente en un mundo pecaminoso.

En cuatro días Kyungsoo aprendió otros aspectos en la vida del Súper Héroe, pero no representaban relevancia para su misión, es decir, no tenía nada de importante saber que Kai se levantaba a las seis de la mañana, se preparaba un desayuno balanceado y luego trotaba, o que llegaba completamente sudado presto para tomarse una ducha. Y luego le hacía morros y se disponía a jugar con él largo rato.

Kyungsoo describía a Kai como una persona demasiado estúpida y juguetona. Se alababa a sí mismo porque la idea de convertirse en bebé había funcionado sin fallo alguno hasta ahora. Kai agotaba su tiempo hablándole como bebé, y haciendo caritas adorables y Kyungsoo sólo se dedicaba a maldecirlo en idioma bebé, y luego Kai respondía con cosas como «¡Uy, bebé quiere agua!» Patético ese moreno.

Pero no era de Kai de quién se quejaba Kyungsoo, la verdad, de todas las personas en la casa, ese moreno era el menos problemático. No podía decir lo mismo del resto de los habitantes de la casa del Gobernador Joonmyun. Cuando Kai tenía que peinar la ciudad buscando amenazas a las qué atacar, Kyungsoo se quedaba al cuidado de Jongdae y Minseok, o de Baekhyun, aunque este era vigilado por Chanyeol porque «¡¿Qué pasa si te dejo sólo y se te ocurre no sé, maquillar al niño como lo hiciste con el pobre Yixing?! Cuando Joonmyun estaba en el perímetro sólo se centraba en admirar al niño y luego decía que era una pena que sus padres le hubiesen abandonado de esa forma, pero que estaba contento de que estuviese en las manos protectoras de Jongin porque necesitaba apegarse a alguien dulce que le sacara sonrisa, en lugar de tormentos y dolores de cabeza.

Kyungsoo nunca entendió por qué todos se preocupaban tanto por las estúpidas sonrisas del moreno.

Sin embargo tenía que lidiar con todo tipo de caracteres, y justo en ese momento estaba al cuidado de Jongdae y Minseok porque Joonmyun y Jongin estaban encerrados en la oficina de este último tratando temas de interés nacional. Kyungsoo quería escuchar pero estaba atrapado entre tonto uno y tonto dos.

—¿Por qué Kyungsoo sólo se ríe con Jongin? —preguntó Jongdae, unos minutos más tarde cuando se rindió completamente de los mimos y cariños para con el pequeñín.

—No lo sé, Jongdae —respondió Minseok, interesado más en ver cómo la gente se movía más allá de la ventana que de los problemas de coexistencia que tenía Jongdae con un bebé.

—¿Será porque se parece a él? —Kyungsoo lo oyó nuevamente, todos lo decían. Él se parecía a alguien más y lo peor es que no sabía a quién, y a juzgar por los comentarios de media casa y los sonrojos de Kai, sea quien sea ese «Él» era muy especial para el héroe.

—Se parece un poco —siseó Minseok, observando detenidamente a Kyungsoo, con su dedo índice golpeando su barbilla—. Mismo color rojizo de pelo, ojos medianamente grandes, piel lechosa, ¡Ja! Puede que sea su hijo perdido.

Dr D.O & Mr Kai → KaiSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora